Autor: David Eduardo Muñoz Gaytán
Residencia: Ojinaga, Chihuahua, México
Según cuentan en tierra sagrada,
las almas el mundo tuvieron que dejar.
La noche se encuentra callada;
la Muerte se arregla para festejar.
Se quita su túnica polvosa;
trae vestido bordado color negro.
Sin duda, la Muerte se ve hermosa
y mira ante el espejo su reflejo.
Se arregla sus guantes y camina;
se encuentra observando en un rincón;
entre flores, velas, cantos y comida,
de vivos y muertos observa la reunión.
Escucha los cantos y las risas;
escucha el latir de su corazón.
Sólo en este día se siente viva.
Sólo hoy su función tiene razón.
Se ve guapa la Catrina;
camina por su fiesta y se encuentra conmovida.
Sólo en México, sólo aquí se te estima,
Muerte, muchas gracias y nos vemos en la otra vida.