■ Aly Abdalla Mahmoud ubica los actos violentos como realizados desde la ignorancia
■ Sólo se puede terminar con los problemas mediante el diálogo, no con bombas, señala
“Soy egipcio, soy musulmán, es mi religión”, concreta Aly Abdalla Mahmoud, abogado de 32 años formado en su país de origen, quien luego de casarse con una zacatecana en 2011, ha asentado su residencia en la capital del estado, y para mantenerse, abrió en el Centro Histórico de Zacatecas un Café Árabe.
Para este hombre, los atentados efectuados en París contra la publicación satírica Charlie Hebdo, y que derivaron en la muerte de 12 personas, han sido motivo de dolor.
“Soy musulmán y no me gusta esta cosa, ellos terroristas, muy malas personas. Ellos no tienen cabeza, no tienen mente para pensar”.
Abdalla Mahmoud ubica los actos violentos como realizados desde la ignorancia, pues El Corán, señala, no dice en ningún lado que se pueda matar.
“Mi religión no dice matar personas, platicamos”, comenta, para insistir en la necesidad del diálogo para arreglar cualquier conflicto.
Debido a este tipo de atentados, personas como Abdalla Mahmoud han sido sujetos de rechazo. Así le sucedió cuando vivió en Italia y Francia, donde la gente en centros comerciales al saber su filiación religiosa mantenía su distancia.
Acerca de lo publicado en Charlie Hebdo, comenta en un español aún mutilado, “ellos hacer una cosa mala para mi religión, ellos tienen una caricatura de mi profeta, pero yo puedo platicar con ellos: por favor ¿por qué tú hacer esta cosa? Nunca en un periódico en mi país hacer una caricatura para Jesús, nunca. Me gusta Jesús, es mi profeta también, el judío también. Me encanta, me gusta todo el profetas, pero no matar nada, mejor platicamos”.
Ellos, agrega refiriéndose a los extremistas, “muy malas personas, mi presidente ayer, él enojado muchísimo con esta cosa, con estos terroristas”.
Aly Abdalla Mahmoud dice, el problema no son las religiones: la judía, la musulmana, la católica, sino las personas que no acatan sus normas.
Un musulmán dice, reza en una mezquita, espacio equiparado a una iglesia para los católicos, pero precisa, la religión no está en la iglesia o en la mezquita sino “dentro de tu corazón”.
“¿Tú qué haces con tu mamá?, tu hacer bien con tu mamá, buena persona. Tú hacer bien con tus hijos, tú buena persona”.
La política y la religión, agregó, son cosas diferentes. En Siria, dijo, existen problemas grandes con el grupo Isis. Cuando se trata de dialogar con estas personas y cuestionarlas sobre las razones de que asesinen, sustentan sus acciones en El Corán, pero son mentirosos dice, pues el libro no señala tal cosa.
En este sentido sostiene hay una interpretación equivocada del texto sagrado. “El Corán nunca dice esto, buscar, ¿dónde El Corán dice?”.
Cuando las personas no estudian, no leen, existe el peligro de la violencia. Sólo se puede terminar con estos problemas mediante el diálogo, no con bombas o con armas, precisó.
