El modelo Constructivista como teoría del aprendizaje, sin lugar a duda, es un ideal, mismo que se complementa con el anhelo de un currículo flexible respetuoso del ritmo de aprendizaje en cada alumn@. Es necesario idear un nuevo modelo educativo desde el contexto real; con la flexibilidad suficiente para que se reconstruya en el proceso según las características y necesidades de cada estado, comunidad y grupo, pero también, con base a los resultados que las actividades y/o proyectos, generen en cada estudiante.
El sistema impone al maestro una forma de trabajo que le impide hacer uso de sus habilidades creativas y de la experiencia acumulada a lo largo de su vida laboral.
Les resultó fácil, pedir a investigadores de Londres su colaboración para la elaboración de estándares curriculares de ensueño que en el futuro funjan como punto de partida en la valoración de las condiciones del Sistema de Educación Básica en México, no obstante, con un modelo de potencia mundial, lo complejo será brindar el ambiente adecuado, en el que tales pretensiones puedan llevarse a cabo.
La nueva reforma educativa RIEB, (Reforma Integral de Educación Básica), dice tener como base en sus programas para la enseñanza al modelo constructivista; sin embargo, su esencia es puramente conductista, mecanicista: el libro de texto como principal estímulo, evaluaciones y calificaciones como condicionantes del aprendizaje; además de actividades homogéneas que al final del ciclo deberán estar completadas, dejando poco margen de tiempo y libertad. En una ocasión, un profesor pidió a sus alumn@s buscar en diversas fuentes, los mejores chistes que encontraran, para luego armar una antología; l@s alumn@s se veían muy entusiasmados, por lo que tal actividad se prolongó más del tiempo contemplado por el programa, mientras l@s alumn@s se divertían, se acercaron de manera positiva al aprendizaje, ejercitaron su memoria, mejoraron en lecto escritura y comenzaron a inventar sus propios chistes involucrando a la comunidad escolar; tristemente, para algunos padres de familia, esta actividad significó una pérdida de tiempo, sobre todo al comparar los avancesde otros grupos en relación a los libros de texto.
Existen métodos y estrategias gestados en diferentes partes del mundo para lograr un aprendizaje significativo y que han sido ignorados por quienes deciden el futuro de la educación en México, quizá por su eficacia en la formación de alumnos autodidactas de pensamiento crítico y creativo. Estos métodos y estrategias, requieren apartarse del libro de texto; que te dice qué hacer paso a paso y de manera uniforme. Un ejemplo, es el método Kumon, ideado en 1954, por el profesor japonés de matemáticas ToruKumon, para que su hijo avanzara a su propio ritmo. Como éste, existen muchos otros que los profesores han encontrado en diversas fuentes o que ellos incluso han inventado; como un ejemplo más, se encuentra el método de Glen Doman para enseñar a leer a niños de hasta dos años de edad.
Los estudiantes tienen diferentes estilos, ritmos e intereses de aprendizaje; en una ocasión, un profesor dejó de tarea a sus alumn@s, escribir en una hoja de su cuaderno, lo que querían aprender durante el ciclo escolar; uno de ellos, elaboró una lista muy ambiciosa: _deseo aprender más sobre dinosaurios y su extinción, mineralogía, astrología y ciencia; claro también quiero aprender a leer y escribir correctamente, además de avanzar en matemáticas. Fue clara su prioridad, el niño, a sus 8 años de edad, conocía sus intereses. Desde el punto de vista del constructivismo, el aprendizaje no gira en el docente, ni siquiera en el alumno, sino en el ambiente propicio que se debe generar para que el alumno acceda a esas oportunidades de aprendizaje mediante su propia acción, guiado por sus intereses.
Sin duda, el profesor que vivió esta experiencia, sabe que su alumno puede aprender más allá de lo que le limitan los libros de texto. Por otro lado, en el grupo también tiene alumnos que muestran enormes dificultades para acceder al currículo regular. Si contara con más flexibilidad curricular; podría llevar a cabo actividades adecuadas, pues sus alumn@s tienen habilidades, necesidades e intereses diversos. Con esto no se quiere afirmar que el libro de texto sea ineficaz, lo poco operable es la forma en que están elaborados, el currículo oculto busca una alienación y limitación de potenciales. Lo peor es que el sistema estigmatice a quienes utilizan otras estrategias que han mostrado ser más efectivas; la buena noticia, es que una vez se cerrada la puerta, el docente es dueño y señor de su práctica educativa, y mejora aún, cuando se tiene una comunicación estrecha con padres de familia sobre los motivos de su práctica.
La construcción de un modelo educativo eficaz, se gesta en el campo real donde se construye el aprendizaje. ■
