■ Necesario, que todas las partes involucradas se junten para encontrar una salida, expone
■ La Universidad es sujeto de auditoría; comunidad debería conocer observaciones, considera
La actual administración central de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) no tiene proyecto administrativo ni académico para resolver la actual crisis institucional, mientras que los grupos políticos no tienen la capacidad para supeditar sus intereses a las necesidades de la Máxima Casa de Estudios, afirmó Trinidad Guerrero Valenzuela, ex coordinador de Personal del departamento de Recursos Humanos.
“Yo no puedo entender un rector que no es capaz de hablar con todos los actores que están presentes en la Universidad, y me refiero no sólo a los grupos políticos, sino también a los académicos. Generalmente los rectores que hemos tenido han sido capaces de resolver junto con todos los actores, eso no es nada nuevo, Es decir, el Rector no ha sido capaz, no sé por qué no, pero lo que es cierto es que no hay claridad acerca de lo que tenemos qué hacer administrativa y académicamente”.
Desde su punto de vista, eso es preocupante porque hay la necesidad que los actores universitarios se junten para determinar el objetivo de sacar adelante la Universidad de la problemática actual, o de lo contrario la situación será más grave el próximo año.
El ex funcionario, destituido por acuerdo entre la Rectoría y el Sindicato de Trabajadores (Stuaz), aseguró que nadie al interior de la UAZ, independientemente de su pertenencia a los diversos grupos, “quiere que se acabe la institución”, pero el problema es juntar a todos los actores con el objetivo común de sanear la institución y no para un proceso electoral.
“Yo espero que las acciones que se sigan tomando sean pensadas no en lo político, sino en lo institucional; si no, no veo cómo salir de esto. Dos terceras partes de mi vida las he dedicado a la Universidad y creo que es necesario que la identidad nos saque adelante a todos”.
Cuando lo invitaron a ocupar ese cargo, la instrucción que le dieron a Guerrero Valenzuela era contener la contratación de personal docente y administrativo, ello como contrapeso a la intención de los centros de trabajo de hacer contrataciones.
“Creo que lo logramos, logramos contener. Inicialmente esta invitación a trabajar se hizo a través del Grupo Universidad. Fui el que eligieron para estar en la Coordinación de Personal, debido a la experiencia que tenía. Lo que me queda claro es que después de este tiempo, de junio a diciembre, no fue posible que hubiera un acuerdo entre los grupos políticos y entonces yo no podía seguir en ese puesto”.
Según informó, desde 2004 a la fecha se han contratado mil 500 docentes, pero en el último año solamente ingresaron poco más de 20 y el procedimiento se fundamentó en lo señalado por el Contrato Colectivo. Antes de ese año, sólo había 2 mil profesores en la institución.
A la pregunta expresa si era justificada la contratación de mil 500 maestros en 10 años, respondió que de su parte, mientras ocupó cargos administrativos, “he buscado que todos los docentes que se justifiquen, pero es buen análisis y habría que revisar indicadores porque cada escuela es diferente”.
“Todos debemos de justificar el trabajo, y tenemos que buscar los mecanismos para asegurar que trabajamos las ocho o las 10 horas. Hasta ahora todavía existe mucho eso de lo bohemio en la UAZ: el que quiere trabajar trabaja y el que no, no. Hace falta cómo avanzar en ese sentido y eso solamente lo podemos hacer cuando hay acuerdos muy claros. Créeme que se necesita mucho más de lo que se hace ahorita”, expresó Guerrero Valenzuela.
Por tanto, expuso la necesidad de implementar mecanismos de transparencia mediante los cuales se de a conocer públicamente que el docente y el trabajador de nuevo ingreso cuente con todos los requerimientos y su justificación.
Ante diversos planteamientos que promueven la idea de detener el crecimiento institucional durante 10 años o de reducir el personal, en especial aquellos con figura de técnicos académicos o académicos profesionales, señaló que hay otras salidas, entre ellas, mover al personal a otros espacios de acuerdo a su perfil.
Para contratar nuevos maestros, en el actual contexto, es importante que se justifique por la jubilación o permiso de otras personas y se determine en qué área va a trabajar y si hay la materia laboral disponible.
En ese sentido, Guerrero Valenzuela manifestó que el Consejo Universitario debe emitir un pronunciamiento sobre el tema de los técnicos académicos y la pugna que existe entre los sindicatos, para lo cual se debe revisar la función de cada uno de ellos en las unidades académicas y determinar si sus funciones son sustantivas o no.
Por otra parte, informó que en este momento la Universidad es sujeto de auditoría “y sería muy interesante que la comunidad conociera estas observaciones, aunque los auditores ven lo mismo que vemos nosotros al interior de la UAZ. Lo importante es pensar qué podemos hacer para corregir en lo que estamos mal. Eso va a ser difícil si no hay acuerdo entre los grupos políticos”.
También señaló la importancia de esperar a conocer las condiciones que establecerá la SEP a cambio de incrementar el subsidio a la Universidad, pero si a los docentes les dijeran acciones específicas para que ello ocurra, “creo que una gran cantidad sí trabajaría para lograrlo y que nos autoricen todas esas plazas”.
La viabilidad de la Máxima Casa de Estudios, entonces, dependerá de la respuesta de la Federación a la demanda de mayor presupuesto que permita atender el déficit de 500 millones de pesos cada año, pero “entre más tiempo dejemos pasar será más difícil”.
