Buenos Aires. Una sorpresiva huelga que paralizó este miércoles cinco líneas de trenes y que afectó a unos 2.7 millones de usuarios que usan el servicio a diario en Buenos Aires y su poblada periferia, generó incidentes en una estación ferroviaria de la capital argentina.
Grupos de jóvenes atacaron con piedras el ingreso a la terminal de Constitución, una de las más concurridas de Buenos Aires, y rompieron vidrios y vidrieras e intentaron incendiar varios comercios.
Frente a la terminal, donde circulan numerosas líneas de omnibús, miles de personas se amontonaron en la hora pico y tuvieron que hacer filas de hasta 200 metros para subirse a algún vehículo y poder llegar a sus hogares.
Los atacantes se dispersaron luego de la llegada de un importante contingente de fuerzas de seguridad durante el cual se produjeron detenciones, según imágenes transmitidas por la televisión.
Horas antes, Horacio Caminos, del sindicato ferroviario La Fraternidad, había dicho que habían ido al paro «porque no nos pagaron todavía el aguinaldo. Hasta que no nos paguen, no levantamos la medida», en declaraciones a Radio 10.
Ante el reclamo, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, respondió que el pago de ese beneficio se realizará este jueves.
Randazzo relacionó la protesta con la decisión del gobierno de colocar cámaras de video en las cabinas de conducción de las locomotoras, a partir de los graves accidentes que ocurrieron en los últimos meses, que provocaron más de 50 muertos y centenares de heridos.
El paro «es consecuencia de la instalación de cámaras en las cabinas de conducción», insistió Randazzo.
La huelga afectó a cinco de las seis líneas metropolitanas, que son Mitre, Sarmiento, San Martín, Roca y Belgrano Sur, por las que circulan unos 2.7 millones de pasajeros al día.
El gobierno estableció nuevas medidas de seguridad en el servicio, como el control de alcoholemia a los maquinistas luego de dos graves accidentes.
Una de ellos tuvo lugar el 16 de junio en Castelar (30 kilómetros al oeste de Buenos Aires) con tres muertos y 155 heridos en la línea Sarmiento.
En la misma línea tuvo lugar una tragedia el 22 de febrero de 2012, cuando 51 personas perdieron la vida y 700 resultaron heridas al embestir una formación el parachoques de la terminal del barrio de Once, en la capital argentina.
