Miscelánea
Hay quienes piensan distinto: tras la muerte queda un murmullo, lento, constante, se va hoy, regresa mañana. A la muerte le faltan palabras. Tras el final queda algo, algo imperecedero: ¿qué es algo?: palabras, cosas, amores, recuerdos, poemas, vidas, casas. La muerte nunca se agota, nunca se va, siempre deja pendientes. Algo es una de ellas: ¿qué es algo?: todo es algo”. Del poeta Toko, citado por Arnoldo Kraus.
Un abrazo solidario para el buen amigo Nemesio Vázquez.
HOMENAJE CRISTERO
“El Gobernador Tello y su Esposa Rindieron Homenaje a los Cristeros”. Informa en páginas interiores un medio de comunicación. El Gobernador y su esposa, así como el presbítero Gabriel Medina Magallanes, encabezaron la tradicional cabalgata hacia el “Cerro de los Cristeros” en el municipio de Tlaltenango de Sánchez Román.
La finalidad del sentido homenaje fue para “fomentar los valores, la identidad nacional y la unión de las familias”.
¿Y el homenaje a los maestros rurales, cuándo y dónde para fomentar los valores ético-laicos?
LA FALTA DE ORTOGRAFÍA
El error ortográfico fue del fundidor, y la falta de imaginación para la inversión en necesidades sociales, ¿de quién?
Trascendió a la opinión pública sobre la entrega de monedas “conmemorativas” del Centenario de la Constitución a los integrantes del Poder Legislativo, a legisladores federales y a titulares del Poder Ejecutivo y Judicial. Con la pena que la palabra “LIVERTAD”, aparece así, con V labiodental.
De verdad que a “los simples mortales” que refería en otro tiempo mi amigo el Diputado Luis Medina, nos pasa sin importancia el detalle de la falta de ortografía. Lo que en realidad nos preocupa es el destino de los 4 millones de pesos descontando los 470 mil 785 pesos de las monedas incultas, más lo que sume el costo de las letras doradas que con la frase “Centenario de la Constitución” serán colocadas en el recinto legislativo.
Quedan más de 3 millones: ¿No sería posible la asesoría de José Enciso o de Mariana Terán y de plano el consejo no pedido de mi amigo “el Oso” a la comisión del Centenario, para que esos 3 millones tengan un destino de interés social y no sean dilapidados en tiempos de crisis? Ya bastante tuvimos con las glorietas de la ignominia de Alonso.
LEGALIZACIÓN EMPEQUEÑECIDA
Mostrando nuevamente sus limitaciones algunos, y otros su subordinación a los dictados de la Secretaría de Gobernación y esta a su vez, del imperio, los diputados aprobaron la iniciativa de Enrique Peña Nieto para legalizar la Cannabis o mariguana sólo para fines terapéuticos.
Después de permanecer en archivo durante meses, seguramente en espera de la anuencia del Comando Norte de los Estados Unidos, por fin se dio cauce y fue aprobada la iniciativa presidencial. En tanto la espera, los Estados Unidos patentaron diversas fórmulas que tienen como base el elemento activo del tetrahidrocannabinol, extracto del cannabis, que como se sabe, ayuda para tratar enfermedades como cáncer, sida, glaucoma, esclerosis y epilepsia, así como trastornos de la vejez.
Un “hecho histórico”, se jactaron en San Lázaro y ciertamente lo es, sólo que por el atraso científico, tecnológico y social que significa una reforma tan limitada, tan temerosa, tan subordinada.
¡Atraso histórico de más de doscientos años! El primer narcotraficante en el mundo, lo fue nada menos que el presidente de los Estados Unidos durante el período de 1801 a 1809, Thomas Jeffersson. Al respecto dice Pablo Capanna en, “Maquinaciones. El otro lado de la tecnología”: “En los Estados Unidos, fue el propio Thomas Jefferson quien contrabandeó plantas de arroz italiano para las plantaciones del sur, y pagó para que se le consiguieran semillas de cáñamo, que entonces se usaba para hacer sogas…”.
Lázaro Cárdenas defendió el arbusto por el uso industrial en la elaboración de hilos de cáñamo para telas de alta resistencia. Recibió la amenaza del imperio de negar la exportación a México de medicamentos producidos en los Estados Unidos. La respuesta: la creación del Instituto Politécnico Nacional. Había Presidente, teníamos a un Estadista.
Y la ignorancia y falta de sentido común de los panistas afloró: Planteaban la aprobación del uso terapéutico de la marihuana, pero no así la siembra, cultivo y cosecha. ¿Acaso pensarán obtener el elemento activo del cannabis, el tetrahidrocannabinol del árbol de aguacate o del nopal verdulero y del huizache?
Imagine Usted. Fábricas de mochilas para los niños de todo México, de tenis, hoy que poco usan el zapato los jóvenes, de chamarras y cuerdas de alta resistencia. ¿Cómo? Con sólo aprobar el uso industrial del cannabis, haciendo a un lado el espíritu lacayuno.
José Mujica como presidente de Uruguay legisló al respecto de una manera íntegra, reglamentada y bajo un control estricto la siembra, cultivo y cosecha. Hoy se tiene un padrón de usuarios de marihuana a quienes se rehabilita con los propios recursos de la venta en farmacias.
México requiere legisladores capaces, instruidos y con dignidad, no sumisos. Hasta entonces… n
