El 15 de enero se dio a conocer la convocatoria para participar en la versión número 31 del Festival Cultural 2017, en mi opinión dicha convocatoria muestra un lamentable retroceso y contiene un buen número de incoherencias.
El Festival Cultural lo creo el gobernador Genaro Borrego con la intención, se dijo entonces, de que los zacatecanos que no salieran de vacaciones en Semana Santa pudieran disfrutar de algunos espectáculos aquí en la ciudad.
En las primeras versiones hubo mucha resistencia para que los creadores zacatecanos pudiéramos participar en el Festival, se nos decía que no era “de los zacatecanos” sino “para los zacatecanos”, ante nuestra insistencia, por fin se permitió la participación de los creadores locales.
Yo he participado en 10 ocasiones con la presentación de una carpeta de diapositivas, proyecciones de documentales y video arte, la presentación de un libro, exposiciones de fotografía y de arte digital, ¿los resultados?, son poco satisfactorios por la desorganización, la improvisación y el eterno no aprender a hacer las cosas que son comunes al Festival Cultural.
A nadie escapa el declive en la calidad de los espectáculos de la últimas versiones, a tal grado que de haber continuado Gustavo Salinas Iñiguez al frente del Instituto Zacatecano de Cultura probablemente en este año tendríamos la participación de Paquita la del Barrio, un homenaje a Juan Gabriel por la Banda del Estado, o grandes momentos en la actuación de la diputada priísta Carmen Salinas en su inolvidable papel de “La corcholata”
Uno de los objetivos de los gobiernos perredistas y priistas que hemos tenido, ha sido llenar la Plaza de Armas y hacer cuentas alegres del número de asistentes, la otra finalidad evidente es hacer alarde del gran número de eventos gratuitos.
En la clausura la gobernadora o el gobernador en turno siempre invariablemente afirman que el Festival de Zacatecas es uno de los mejores de México y está a la altura de los mejores Festivales de su tipo en el mundo, ¿ignorancia?, ¿demagogia?, ¿deshonestidad?, ¿autocomplacencia?
Ya existe un conflicto entre los organizadores del Festival y el Obispo Barceló porque se interrumpen las celebraciones litúrgicas de Semana Santa en La Catedral y por el daño que se le causa al edificio con los altos niveles del sonido.
En las 30 versiones anteriores el tema había sido libre, ahora se impone un eje temático: Migración sin fronteras, la experiencia artística desde la interculturalidad, ¿un tema de candente actualidad?, sí junto con la contaminación, el calentamiento global, la igualdad de género, los problemas de la obesidad, el cáncer infantil y un largo etcétera.
Según académicos de la UAZ las migraciones se presentan ante una crisis, en Zacatecas es un fenómeno que se ha presentado en diferentes épocas desde hace más de 100 años, por ejemplo después de la Toma de Zacatecas; la migración es un fenómeno social sumamente complejo, el tema es más adecuado para un congreso multidisciplinario que genere propuestas concretas y que a su vez se traduzcan en acciones bien definidas.
Al imponer un tema para el Festival 2017 se debe tomar en cuenta que para generar productos culturales con profundidad y calidad estética evitando lo trillado o superficial, se debe dar suficiente tiempo, proporcionar la asesoría necesaria y contar con los recursos económicos.
En este momento cuando ya Donald Trump aprobó la construcción de un muro fronterizo hablar de una “migración sin fronteras”, se reduce nada más a enriquecer la lista de utopías de lo que “idealmente” debería ser el mundo, incluidas en la hermosa canción “Imagina” de John Lennon.
Considero una arbitrariedad que de la convocatoria se hayan excluido artes plásticas, fotografía y video. En Zacatecas existe un gran número de artistas plásticos con trayectoria además la fotografía y el video son medios idóneos para mostrar aspectos del complejo fenómeno de la migración, pero por lo visto esto no se tomó en cuenta.
Para poder participar es necesario que los espectáculos, incluida la ópera, demuestren que ya hayan sido presentados, ¿existe ya una ópera zacatecana sobre el tema de la migración? si no existe, habrá que escribirla, ensayarla, ponerla en escena, tomarle fotos, video y que los periodistas culturales o ensayistas escriban críticas, todo antes del 31 de enero fecha en que se cierra la convocatoria, si existe algún creador zacatecano que pueda hacer todo esto en un tiempo récord, debería estar en Nueva York, París o Viena y no en Zacatecas desperdiciando su talento.
Se esperaba que con la experiencia de 30 festivales organizados habría un replanteamiento de los objetivos del festival, su reubicación, mejorar la organización pero tal parece que por este año no va a ser así, el mundo cambia vertiginosamente pero en Zacatecas muchas cosas siguen igual. ■
