“Esto nos afecta a todos y apenas es la primera vez. La mayoría todavía no pone gasolina; el día que ponga se va a dar cuenta. Pero el día que vaya a la tiendita de la esquina por las tortillas, el kilo de frijoles”, dijo el orador en la explanada de la Legislatura del estado, quien fue reforzado por la muchedumbre que agregó: “la tenencia, la luz, el agua, el gas…”
“Ya hay masacre. Nos están desangrando totalmente con sus impuestos. La economía va a pique. Disculpen la palabra, ¿hasta cuándo el mexicano y nuestros hermanos policías, las corporaciones, el Ejército, cuándo es, cuándo vamos a despertar, pienso yo?, agregó una mujer quien avizora para México, de seguir la situación como va, que termine como un Venezuela, un Chile o un Siria.
Un contingente convocado a través de las redes sociales cerró la mañana de este 3 de enero una de las oficinas de Recaudación de rentas de la Secretaría de Finanzas ubicada en la calle Fernando Villalpando del Centro Histórico de Zacatecas. Fue, se dijo, una primera medida en rechazo al gasolinazo y el incremento de impuestos.
Las organizaciones convocantes a esta movilización fueron Zacatecas se levanta y el Frente de Estudiantes Zacatecanos Unidos (FEZU).
Las personas a veces sumadas en familias enteras se concentraron originalmente a las 9:30 de la mañana en la plaza Bicentenario, para luego iniciar una marcha en la Máquina 30-30 rumbo al Centro Histórico de la capital del estado. Su primer objetivo era cerrar la oficina de Recaudación de rentas que se ubica en Palacio de Gobierno, en la Plaza de Armas, aunque no pudo concretarse porque fueron cerradas las puertas.
La siguiente parada fue en la correspondiente oficina ubicada en la calle Fernando Villalpando, a la que ingresaron gritando consignas, ofrecieron algunos discursos dentro y luego tomaron la decisión de su cierre, desalojando enseguida a los trabajadores de Gobierno del Estado que se encontraban dentro para sellar la puerta con una manta.
Ya en la explanada de la Legislatura del estado se manifestó otra exigencia, el que la alta burocracia del país reduzca sus salarios; se convocó a la difusión entre familiares, amigos y compañeros de trabajo para que no se pague la tenencia ni el predial y, en general, “¡a no pagar impuestos!”, pues, dijo la voz, sería aceptar lo que está proponiendo el gobierno; asimismo, se levantó otra para exigir que los diputados y senadores por Zacatecas que aprobaron el gasolinazo den la cara al pueblo y entreguen cuentas de su decisión.
La asamblea decidió no realizar otra acción más en la jornada. Entre las que se proponían, estaban la toma de las oficinas de Tránsito o una gasolinera, esta última puesta a consideración por un taxista.
El balance que se hizo fue que había en ese momento más integrantes de corporaciones policiacas que manifestantes, pues el contingente del FEZU había abandonado la marcha para atender una conferencia de prensa que otro grupo de organizaciones ofreció también para exponer su rechazo al alza de impuestos y del precio de combustibles en el país.
El acuerdo de la asamblea tomado frente a la sede de la Legislatura local fue sumarse a las “grandes movilizaciones que se preparan” a nivel nacional en rechazo al gasolinazo, la más cercana el 7 de enero y para la que se convocó a las personas a sumarse en punto de las nueve de la mañana para salir nuevamente de la Máquina 30-30.
La animosidad fue tal que, ante la propuesta de dar continuidad a las acciones para esa fecha o el siguiente día, se espetaba, “¿por qué no ahorita?” Así se hizo otra convocatoria local para mañana 4 de enero a las 8:30 horas en la plaza Bicentenario, desde la que partirán para intentar “cerrar otra dependencia donde se cobre”.
