■ Anuncia Policía Ministerial que se han emprendido acciones legales contra dirigentes locales
■ Exige la empresa extractora canadiense que se libere el complejo para iniciar con el diálogo
La toma por transportistas y ejidatarios de comunidades del municipio de Mazapil, de las instalaciones de minera Peñasquito Goldcorp, que fuera iniciada el pasado 26 de septiembre a las dos de la mañana, se mantiene. Y sin diálogo de por medio, este martes alrededor de las 17 horas se presentaron elementos de la Policía Ministerial para notificar entre otros, a Ascensión Carrillo, uno de sus representantes, que la canadiense ha iniciado una demanda en su contra, presuntamente, por obstruir los trabajos de la empresa.
Ante el reclamo de los integrantes de las comunidades de una negociación, ahora respecto del servicio de transporte de materiales y agua que ellos brindan a la minera, la respuesta de la corporación fue solicitarles que liberaran las instalaciones para luego iniciar el diálogo; un método ya conocido por ellos y que apuntan como la forma con que la canadiense ha evadido siempre solucionar las problemáticas, pues ese diálogo nunca sucede.
El método consiste en enviarles empleados que no tienen capacidad para tomar decisiones. Incluso en este momento, desconocen quién es el gerente de Peñasquito Goldcorp, refirió Lauro Herrera Méndez.
Precisó que la situación involucra a alrededor de 600 operarios de unos 300 camiones, muchos de ellos a la par como es su caso, ejidatarios que rentan sus tierras a la empresa extractiva, quienes se quedarían sin trabajo en caso de que ésta desconozca los acuerdos celebrados con las comunidades en 2009, que implican entre otros puntos, priorizar la contratación de sus habitantes en la prestación de servicios a la empresa, como el transporte.
Respecto de la presencia de la Policía Ministerial ayer, comentó que no dejarán solos a quienes han sido señalados por Peñasquito-GoldCorp como presuntos responsables de delitos que la afectan, pues son solo representantes de los ejidos y comunidades. Por el contrario, la situación los conmina a reorganizarse para sumar más personas de los ejidos afectados en su respaldo.
“Porque realmente a nadie de los compañeros representantes los vamos a dejar solos, óiganlo bien. Ascensión y otros son únicamente representantes de todos los ejidatarios afectados, por sus camioncitos que les quieren echar fuera o que nos quieren afectar a todas las familias que de ahí dependemos. Nosotros estamos con él y nunca lo vamos a dejar solo”.
Peñasquito Goldcorp habría denunciado que los ejidatarios y camioneros obstruyen el tránsito de salida y entrada a sus instalaciones, algo que negó Lauro Herrera Méndez, quien dijo que sí están colocados los camiones en el perímetro y no los moverán hasta que “haya una respuesta favorable para todos”, pero están permitiendo “que salga todo lo que se pueda”. Dijo no obstante que “no vamos a dejar entrar por seguridad de todos”.
“Todo está tomado”, también las instalaciones del aeropuerto, el helipuerto y el departamento donde se realizan análisis de minerales ubicado en la cabecera municipal, y en ello se han involucrado afectados por las actividades extractivas respecto del agotamiento de mantos acuíferos y contaminación ambiental que ya ha afectado el cultivo de parcelas, de las comunidades de Cedros, El Vergel, Tecolotes y Matamoros, esperan que los hagan asimismo gente de El Rodeo, Mazapil y Cerro Gordo.
“Ayer contábamos con más de mil gentes sin contar a las familias, no quisimos arrimar familias pero de ser necesario tendremos que dar ese paso que sigue”, dijo Herrera Méndez.
Los camiones que cercan hacen filas “que están llegando a Palma grande, acá al Cerrillo a un lado del Mazapil, y otros tantos que están allá en el aeropuerto en la entrada de Mesas, en la entrada de Palmas, en la entrada de la subestación allá por Charcos, muchisisísimo muy grande esté ahora el movimiento”.
A la problemática relación que ha habido históricamente entre la Peñaquito Goldcorp y los ejidatarios de Mazapil, se agrega que en la pretensión de abaratar sus costos por el acarreo de materiales, la empresa se ha negado a firmar otro contrato con los camioneros que se constituyeron dentro de un sindicato liderado por la CTM, para poder acordar este servicio con una empresa constructora foránea que llegaría con maquinaria y mano de obra.
“La mina está cerrada a no darle ya un contrato más a los agremiados, porque ellos argumentan que ya no hay gente con el sindicato, lo cual es una vil mentira, debe haber más de 300 camiones entre pipas y camiones de acarreo, todos en la puerta de la mina”.
“Hay un convenio de la mina con la región y se tiene que respetar” dijo, mismo que involucra el que la Peñasquito Goldcorp iba a constituirse en una fuente de empleo para las comunidades.
A media mañana “salió una gente de la mina que sí quieren arreglar pero nos quieren hacer lo mismo de siempre, que nos retiremos y para tal día negociamos. Yo creo que ya no vamos a caer en ese juego de ella porque ya le conocemos sus argucias. Vamos a esperar, si quieren arreglar bien, y si no, aquí vamos a permanecer el tiempo que sea necesario”.
