Río de Janeiro. El mexicano Edgar Rivera quedó eliminado este domingo en la ronda clasificatoria del salto alto de los Juegos Olímpicos de Rio, donde sólo pudo saltar 2,17 metros, antes de fallar tres veces ante la barra del 2,22 metros.
Para clasificarse a la final se necesitaba saltar un mínimo de 2,31 metros o conseguir uno de los doce mejores resultados.
Tras la prueba, Edgar Rivera admitió que no entendía qué había fallado y por qué había tenido una actuación tan negativa en esta cita brasileña.
«Me sentía bien, nunca pensé que iba a salir en esta altura. Vine con mucha confianza y muy contento de defender a México, como siempre lo estoy. Una decepción», afirmó Rivera, de 25 años y que se entrena en Alemania.
Quedó lejos del 2,30 metros, su mejor marca personal y de la temporada.
«El objetivo era estar entre los doce mejores para estar en la etapa final el martes. Nos quedamos bastante alejados de esa meta. Ahora regreso a Alemania, tengo dos competencias más programadas y luego veremos cuál es el plan con mi entrenador», explicó.
Edgar Rivera disputaba en Rio sus primeros Juegos Olímpicos. Era su regreso al máximo nivel, después de haber estado también en los Mundiales de Daegu-2011 y Moscú-2013, donde igualmente fue eliminado en la ronda clasificatoria.
Es el hermano de Luis Rivera, que en ese Mundial de Moscú se colgó la medalla de bronce en el salto largo.
