En un sondeo realizado por La Jornada Zacatecas entre los asistentes asiduos a la Feria Nacional del Libro Zacatecas, buscando su opinión respecto a la propuesta del evento este 2015, lo más señalado fue la poca difusión que se le ha dado, del tal manera que la mayoría de la gente que fue abordada no conocía su programa de actividades.
Uno de estos casos, el del estudiante del Instituto Politécnico Nacional, Emilio Antonio Andino Ortega, quien visita esta feria desde hace seis años, expone justo su desconocimiento acerca de la existencia de una programación alterna de talleres, presentaciones de libros u otros espectáculos alusivos o complementarios a la exposición de libros.
“Nunca he venido a una presentación, no había visto que tenían programa. Siempre que he venido es a recorrer los stands y a ver qué libros tienen (…) es la primera vez que me topo con uno de estos”, dijo respecto a políptico que tenía entre sus manos.
El estudiante de Ingeniería en Alimentos, atribuyó esto a la poca difusión que se le da mediáticamente a la Feria Nacional del Libro Zacatecas.
“Yo no soy mucho de ver en la tele pero el periódico lo reviso a diario y las redes sociales no se diga, y no he visto nada de la difusión que debería de tener un evento de esta magnitud, mucho menos la distribución de programas”.
En este sentido el joven y otros visitantes a quienes interrogó el medio, no pudieron ofrecer una opinión respecto de la propuesta de los eventos programados.
Positivamente, el estudiante ponderó la variedad expuesta de materiales bibliográficos, dijo que las editoriales se la tomaron “más en serio”.
Sin embargo lamentó las fechas programadas para la celebración de esta expo venta, pues para el caso de él mismo y su acompañante, ambos jóvenes lectores, los encuentra en medio de un periodo en que han pagado sus colegiaturas y por otro lado termina antes de que les sea pagada su quincena laboral.
Por ello Emilio Antonio, agregó, la feria del libro le da la oportunidad de ver los materiales y “nada más dar el rol”, cosa que ya ha hecho en tres días diferidos.
Acerca de los precios dijo no notarlos “muy atrayentes” y más bien le parecen casi iguales a los que pueden encontrarse en las librerías locales, no obstante la presencia de las editoriales permite ocasionalmente acceder a materiales que de otra manera serían difíciles de encontrar, y puesto sobre la posibilidad de conseguirlos vía Internet, pudiera haber una diferencia a favor del cliente que compra en directo en este lugar, argumentó.
Acerca del espacio donde se propone cada año la Feria Nacional del Libro de Zacatecas, la Plaza Bicentenario, le parece amplio y accesible en comparación con la posibilidad de que pudiera realizarse la exposición y sus actividades quizás en Palacio de Convenciones.
Eric de la Rosa, otro lector asiduo, y quien también tiene experiencia como vendedor de libros, lamentó asimismo la calendarización de la feria del libro, en este caso entre otros, por factores climatológicos.
Agregó como otro aspecto a cuidar luego de recorrer la exposición, el que faltan editoriales universitarias de las que se obtienen libros especializados, citó el caso de la UNAM.
Observó que sí hay ofertas en los stands de libros, pero insistió en que la época del año es difícil para la clientela porque casi todos están “gastados” debido al regreso de vacaciones, y el ingreso a clases.
Acerca del programa expuso que se encuentra “desbalanceado”. En este sentido agregó “no nada más es hacer un programa y ahí va” sino que tiene que ver con los objetivos proponer un festival del libro y la lectura y para la formación de lectores.
Dijo, hay cosas que pueden hacerse y que no implican inversiones como lecturas colectivas aprovechando los aniversarios que cumplen muchos autores este año.
“Sabemos que es difícil la situación para todo lo que tiene que ver con cultura porque ha sufrido recortes y recortes, porque se considera una actividad de tercera”.
Pero precisó por el contrario, que es algo que “nos da las bases para saber cómo vivir mejor, cómo superarnos, pero a mucha gente no le interesa”.
Reiteró sobre el programa “está de chile, mole y pozole y poca lectura. Pocos autores muy conocidos”.
En este sentido refirió sobre la ausencia de escritores de relevancia nacional u otros denominados de éxito, “no hay nada más sabroso que oír a un autor sobre su obra, no sólo del proceso creativo sino de cómo le emocionó hacerlo”.
Yersinia Muñoz, egresada de la Unidad Académica de Letras de la UAZ, aportó también sobre el tema la necesidad de mayor presencia de escritores y puso énfasis nuevamente en la divulgación del programa de actividades de la Feria Nacional del Libro de Zacatecas. “Creo que nos estamos quedando cortos en cuestión de cultura”.
Expuso luego de recorrer sus pasillos, su percepción, “son las mismas editoriales de siempre, creo que pudieran entrar más editoriales”, y añadió sobre los precios, se encuentran en un rango estándar con los que se ofrecen en la ciudad comúnmente.
“Yo estoy realmente como triste, no me ha gustado” agregó en referencia al lugar, el programa y “la poca atención que ha brindado el gobierno” al evento así como la escasa concurrencia, “a pesar de que es un lugar público donde la gente tiene que pasar todos los días, yo veo que no asiste a este tipo de eventos”.
Externó su deseo de “que el próximo año tengamos un mejor gobierno el cual preste mayor atención a este tipo de eventos porque finalmente la cultura lo es todo”.
