La Seguridad Social en nuestro país tiene una historia que inicia aproximadamente hace cien años. Nace ante la necesidad de proteger a los trabajadores de las enfermedades que se presentaban con mayor frecuencia en esa época.
En nuestro país la Seguridad Social ha evolucionado hasta consolidar instituciones de gran fortaleza y amplia raigambre en nuestra sociedad como son el Instituto Mexicano del Seguro Social, que tiene más de 50 millones de derechohabientes (IMSS); el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, que protege a mas de 12 millones de derechohabientes (ISSSTE); los Institutos Estatales como el Issstezac, que existen en la mayoría de los estados y el recién nacido Seguro Popular.
La Seguridad Social concebida actualmente tiene una amplia gama de servicios que debe prestar para un desarrollo integral de las familias:
La promoción de la salud a través de programas de fomento.
El tratamiento en la enfermedad.
La recuperación de la salud a través de la rehabilitación.
El servicio médico gratuito para estudiantes de educación media y superior.
La recreación y cultura como complemento del desarrollo humano.
El deporte como pilar fundamental de la salud y prevención de adicciones.
La protección del derechohabiente en los casos de rehabilitación.
El financiamiento para la adquisición y mejoramiento de la vivienda.
El ahorro para el retiro como fruto del cumplimiento puntual que el trabajador recibe por los años de servicio y su capitalización que lamentablemente tiene que compartir con la Afore.
Así como la pensión vitalicia que le permitirá vivir con restricciones y que sin embargo ha sido segura hasta el día de hoy.
Los trabajadores universitarios tenemos más de 20 años afiliados al ISSSTE y más de 10 años hemos pagado la parte que nos corresponde a través de la administración universitaria.
El ISSSTE es una institución tripartita, es decir recibe para cumplir con su misión cuotas provenientes de Gobierno Federal, de la administración universitaria y del trabajador docente o administrativo que presta sus servicios a la Institución.
Hoy, lamentablemente a pesar de que Gobierno Federal y el trabajador universitario han aportado las cuotas correspondientes a la Seguridad Social, no han sido entregadas al ISSSTE.
Cierto, la institución ha crecido en beneficio de los estudiantes zacatecanos y sus familias pero es muy lamentable que como dice la administración universitaria sea desprotegiendo a los trabajadores universitarios al dejarlos a la deriva sin Seguridad Social.
Por eso hoy ante la incertidumbre es necesario que el Honorable Consejo Universitario y sus comisiones analicen con seriedad estos problemas que si no se atienden van a ser motivo de inestabilidad constante al interior de la UAZ.
Es urgente que el Honorable Consejo Universitario evalué todas y cada una de las acciones y omisiones en el seno de la UAZ, así como ordene los lineamientos correctivos necesarios para que esta entrañable Institución tenga un mejor porvenir y dé tranquilidad a la comunidad universitaria y a la sociedad zacatecana a quien tiene la misión de servir.
*Docente de la Unidad Académica de Veterinaria.