■ Ella deberá explicar a su familia y al gremio periodístico por qué se ausentó durante 16 días: Nahle
Poco más de dos semanas después de que la periodista del portal de noticias Línea Informativa, Zoila Edith Márquez Chiu desapareciera, este lunes regresó a casa con sus familiares.
La aparición de la reportera fue confirmada por los padres de la joven y, posteriormente, por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Zacatecas (PGJEZ) a través de un comunicado en el que únicamente se informaba del reencuentro de la joven con su familia, sin dar detalles sobre su desaparición.
Según expuso el procurador Arturo Nahle García en el boletín enviado por Gobierno del Estado, “será Zoila quien explique a su familia y al gremio periodístico las razones por las que se ausentó durante 16 días”.
Dijo que fueron los padres de la periodista quienes informaron a las autoridades que su hija ya se encontraba en casa, ilesa y en buenas condiciones de salud.
El funcionario agregó que al no haber un presunto delito que perseguir, las autoridades estarán a la espera de la información que pueda proporcionar la reportera.
Por su parte, el padre de la periodista, Humberto Márquez, informó mediante un breve comunicado que “por considerar que los motivos de la desaparición de nuestra hija son de índole familiar, nos reservamos su difusión”.
Márquez Chiu permanecía en calidad de no localizada desde el pasado sábado 7 de diciembre, cuando salió de su domicilio en la avenida San Marcos, de la capital zacatecana, a las 14:30 horas para supuestamente devolver unas películas rentadas a un videoclub ubicado en la avenida Cinco Señores.
No obstante, de acuerdo a una seria de nueve fotografías mostradas la semana pasada por el procurador Nahle García, la periodista no se dirigió a aquel establecimiento, sino que salió al bulevar López Mateos rumbo a Guadalupe. La última imagen correspondía a la que tomaron las cámaras de videovigilancia instaladas en la Unidad de Seguridad Regional (Unirse) en Las Arsinas.
Con ello, el funcionario descartó que se tratara de un secuestro e informó que una de las líneas de investigación que se estaba siguiendo era la de localizar a Márquez Chiu en la Ciudad de México, donde residen dos amigas cercanas de la reportera.
Sin embargo, unas horas antes de la aparición de la joven, ayer sus padres Humberto Márquez y Zoila Chiu ofrecieron una conferencia de prensa en la que aseguraron que las fotografías mostradas por el procurador no eran concluyentes pues, a pesar de que el automóvil sí era el de su hija, la calidad de las imágenes no permitía reconocer a 100 por ciento el rostro de la mujer que manejaba el vehículo.
Humberto Márquez comentó que, con la colaboración de un perito conocido por la familia, se hicieron pruebas para verificar que la mujer que manejaba el vehículo en las imágenes mostradas por el funcionario fuera efectivamente Zoila Márquez.
No obstante, tras realizar comparaciones con varias personas que tienen un automóvil semejante al de su hija, la conclusión del experto en peritajes fue que la estatura de la reportera desaparecida, que es de 1.50 metros, no correspondía a la de la conductora que se podía ver en las fotografías.
Además, los padres de Zoila Márquez descartaron que ella se encontrara en la Ciudad de México con alguna de las dos amigas cercanas a las que hizo referencia el procurador.
Esto lo determinaron, precisó el padre de la reportera, debido a que una de las jóvenes ya se encuentra residiendo en la ciudad de Zacatecas y la otra compañera desconocía el paradero de Márquez Chiu. Esta última información también fue corroborada por la Policía Federal, informó Huberto Márquez.
Reconocieron que en un primer momento, cuando vieron las fotografías, “dijimos que sí era el auto y que sí era nuestra hija”. Aun así, reiteraron que tras realizar las pruebas y de acuerdo a la estatura y la posición de quien se encontraba al volante en las imágenes, “tenemos dudas y queremos comprobar a 100 por ciento que ella es la que va manejando”.
Sin embargo, pocas horas después la reportera apareció ilesa y se reencontró con sus familiares 16 días después de haber desaparecido.
