■ Muestra aspectos de la vida cotidiana y el espacio habitacional
Como parte del programa académico del 30 Festival Cultural Zacatecas 2016, la historiadora de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Lorena Salas Acevedo, presentó el libro Arquitectura y transformación de la ciudad de Zacatecas en el siglo 18, en el que retrata la composición de la sociedad con base en las características de su vivienda.
El libro fue comentado por el historiador Enrique Florescano, quien destacó el contenido de la obra porque aborda el desarrollo espacial, urbano, arquitectónico, económico, social y cultural de esta ciudad, combinando perspectivas como las del geógrafo y el experto en el medio natural.
“El libro introduce al entorno físico y natural, al arroyo que serpenteaba al lado de las vetas mineras, al entorno montañoso y a los reducidos espacios planos donde se asentaría lo que sería la opulenta ciudad de Zacatecas en el siglo 18”, dijo.
Recordó que, desde su inicio, la población zacatecana ha estado marcada por la desigualdad étnica, social y económica. En ese sentido, el libro informa cómo a partir de las llamadas haciendas de beneficio de metales nació una población mezclada, tumultuosa, integrada por indígenas, mestizos, criollos, migrantes españoles, europeos y negros esclavos.
La mayoría de la población en ese momento fueron trabajadores indígenas traídos del México central, negros, mulatos, y gente mestiza que se estableció en los diferentes pueblos, barrios y caseríos distribuidos alrededor del centro urbano donde se levantan las plazas, templos, capillas, hospitales, edificios públicos, casas, casonas y palacios de los religiosos, comerciantes, mineros y administradores de las haciendas de metales. “Este asentamiento urbano es el espejo fiel de la composición estamental de la población”, expuso Florescano.
Asimismo, destacó el estudio que hace la autora de la habitación tanto de la población trabajadora como de la media y alta, pues contempla los materiales de construcción, el tamaño y distribución de la vivienda, la tipología del inmueble, el uso habitacional y social, el mobiliario, el equipamiento, el estilo y la ornamentación, entre otros elementos.
El libro muestra entonces diversos aspectos de la vida cotidiana y el espacio habitacional, es decir, no solamente se estudió el espacio físico, sino también el aspecto material y los sectores sociales protagonistas.
El periodo de estudio que aborda la obra es el segundo y tercer tercio del siglo 18, sin dejar de lado los antecedente urbanísticos del siglo 16 y 17, mientras que el marco conceptual utilizado para explicar la vivienda zacatecana es atractivo, pues incorpora tipología de la arquitectura doméstica, además de elementos de la vida privada para distinguir los espacios de la aristocracia y los del pueblo.
También comentaron la obra los académicos Lidia Medina y Limonar Acosta, mientras que Salas Acevedo, quien dijo que obras como la presentada da la posibilidad “de entender nuestra identidad, nuestro origen, de dónde venimos, quiénes somos y de qué forma vamos modificando nuestra conducta”.
