Mandragore
Desde las hondas raíces de la inconformidad emergen en Zacatecas, en el año 2001, los personajes que padecen esa alergia por las cuestiones metafísicas y mortuorias que, a la postre, dejarían las ancestrales estrategias de lucha por sobresalir en la escena, para adquirir un carácter universal en las cuestiones que los mantienen ungidos al rock metal zacatecano por medio de la iniciativa, la perseverancia y la preparación. Luis González “El vaca” en la batería, Vladimir Delgado en las vocales y Eduardo Castañeda en las guitarras, luego de peregrinar por algunas agrupaciones, deciden iniciar un proyecto que no se pareciera a lo que se tocaba por doquier. Completaron la alineación con Rogelio Hernández en el bajo, para iniciar como Mandragore una trayectoria que hasta el momento los coloca como la alternativa de Zacatecas para el orbe.
Tomaron sus principales influencias musicales para ir traslapando una serie de sonidos que trajo como consecuencia un estilo que, tras la experimentación en las diversas corrientes del metal, fueron incorporando al doom, al thrash, al black hasta consolidar una propuesta basada en la brutalidad, el desquiciamiento y los agresivos y veloces sonidos de las guitarras que hacen más densas las piezas, para envolverlas con los cavernosas notas que, a bocanadas guturales, expresan en sus líricas -algo pesaditas en su contenido-, para ir cayendo poco a poco en los espacios en que yacen todos los grandes, en los oscuros e intrincados caminos de lo que viene después.
El death metal como forma de expresión
Mandragore grabó sus primeras piezas en 2002, tales como ‘Angel caníbal’, ‘Perdí mi alma’ y ‘Galerías nocturnas’. Para dar continuidad a su proyecto le entraron al camino de la profesionalización y la segunda producción, Vacío, grabada en 2003 y la cual marca la diferencia en los 10 cortes que conforman el disco. Dark Tranquility, Emperor, Archenemy, In Flames, Carcass, Slayer, entre otros, son parte de su musicalidad como motivación para ir evolucionando en sus estructuras armónicas, porque estos chavos saben lo que quieren, no son improvisados, poseen grandes dosis de preparación, estudio y técnica para hablar con conocimiento de causa, con lo que saben hacer, que es tocar con destreza y sentimiento; se pasean por los derroteros del metal y cantan sobre las sendas recorridas en el devenir mundano; por eso, han recibido invitaciones para abrirles a grupos de los llamados grandes y han sido tomados en cuenta en acoplados para compañías extranjeras como la Midwest Nailgun de Estados Unidos de América. La salida de Luis “El vaca” como uno de los miembros fundadores provocó un receso de casi un año hasta que se incorporó Diego Delgado, quien llegó para fortalecer con su ‘punch’ los alcances de una banda que, con el correr de los tiempos, establece su dominio en los territorios de los zacatecos.
From Beyond
De las mejores agrupaciones en el circuito estatal, considerada como la propuesta fresnillense de death metal melódico, surgida en 2004 a consecuencia de la relación entre Sergio, Gerardo y Omar, cuando cursaban la prepa. Inspirados en Lovecraft para escoger el nombre de la banda, comenzaron a componer piezas propias a pesar de no tener un vocal base; Efrén Troncoso les hizo el paro temporalmente y grabaron el primer demo titulado ‘MMV’, con las piezas ‘El reinado del fuego’, ‘Agonía’, ‘Coatlicue’, ‘Kronos’ y ‘Eutanasia’.
Para la segunda producción independiente asumieron una postura de mayor profesionalismo y realizaron algunos cambios: Angel “El Troll” se hizo cargo de las vocales y, provisionalmente, utilizaron secuencias de batería para conformar ‘Absit’ con un sonido más actual, ‘Si es el fin’, ‘En el olvido’, ‘Retrato de un mal recuerdo’, ‘En silencio’ y ‘Alas rotas’. Para su participación en la tercera Muestra de Rock Zacatecano en El Chopo ya contaban con un baterista de planta, con quien montaron un set muy apegado a las estructuras dominantes.
La agrupación, que se desintegró hace tres años aproximadamente, siempre demostró el poderío de su sonido, quizá fue una de las alternativas para trascender; sólo hizo falta que desplegara más sus armonías, que tuviera más variedad en sus líneas de composición, para que se vieran las armas que portaban estos guerreros de la oscuridad, de una ciudad humeante llena de pasajes carcomidos por los embates del tiempo y los sucesos necrofílicos de luchas libradas por sus antecesores, que, a brazo batiente, destrozaron todo vestigio de dominio dogmático y de explotación. Los beyondes poseían una tremenda presencia que les hacía aparecer en los escenarios como una buena banda de metal.
Luego del rompimiento, ‘Serge’ tocó con Mandragore y, ahora, con In Suspended Atmospheres; el ‘Gera’ ejecuta jazz y también está con In Suspended Atmospheres; el resto ya no ha sido visto en escena.