Atlanta. Al aspirante a la candidatura por el Partido Republicano a la presidencia estadunidense Donald Trump se le retiró la invitación a un acto de campaña electoral del partido debido a sus irrespetuosos comentarios sobre una presentadora de televisión.
Trump insinuó que la periodista de la cadena Fox Megyn Kelly, que moderó el primer debate televisado de diez candidatos republicanos en la noche del jueves, tenía la menstruación cuando le lanzó duras preguntas.
Erick Erickson, editor de RedState.com y anfitrión de un acto de campaña de dos días que comienza hoy en Atlanta (estado de Georgia), en el que Trump iba a ser el orador central, consideró que el magnate fue demasiado lejos.
Trump se había quejado de haber sido tratado con excesiva dureza durante el debate por Kelly, que le preguntó por declaraciones sexistas vertidas anteriormente.
La pregunta encendió a Trump, que después calificó a Kelly de poco profesional en su cuenta de Twitter. Pero en una entrevista de la emisora CNN, Trump fue más allá: «Se podía ver que la sangre salía de sus ojos. La sangre le salía también de su otro sitio», dijo.
Según dijo Erickson a la CNN, Trump se pasó de la raya con sus declaraciones y dijo que incluso para quienes manifiesten su opinión sin reparos hay límites, el de los buenos modales y la decencia. Por eso fue excluido del encuentro RedState en el que se espera la presencia de diez candidatos republicanos.
Trump es conocido por sus controvertidas declaraciones y ataques personales, como las vertidas contra los mexicanos que entran ilegalmente a Estados Unidos, a quienes tildó de «violadores» y «narcotraficantes». También acusó al senador John McCain, piloto herido, hecho prisionero y torturado durante años en Vietnam, de no ser un héroe por haberse dejado capturar por el enemigo.
