■ El Mirador de Heródoto
En un contexto económico neoliberal… “La educación pertenece a quienes pueden pagarla; la represión se ejerce contra quienes no pueden comprarla.”
Eduardo Galeana
Verba volant scripta manent es una frase lapidaria de Cayo Tito, senador romano, que significa “las palabras vuelan, lo escrito queda”, que en la actualidad significa “lo escrito permanece”. Y efectivamente, lo escrito se mantiene, existe.
Gracias a eso tenemos información de los efectos del neoliberalismo en la educación superior pública desde décadas atrás. En el órgano informativo Gaceta UAZ N° 52, septiembre de 1992, pp. 9-14, sale un artículo titulado “Sobre la viabilidad de la universidad pública”, y discurre sobre una reunión realizada en esos días, entre el entonces secretario de Educación Pública Ernesto Zedillo Ponce de León con miembros de la ANUIES. Entre las conclusiones del Lic. Zedillo, encabeza la lista la siguiente: “Está en duda la viabilidad de la Universidad Pública”. Las otras determinaciones van en el mismo sentido.
Lo anterior generó una serie de declaraciones de intelectuales, de las cuales hacemos una referencia mínima. Hugo Gatell consideró que “esta declaración no es gratuita; es coherente con toda una línea de gobierno para que las instituciones públicas sean poco a poco sustituidas por privadas”.
Por otro lado, Leonardo Figueira dijo que “la política del actual gobierno es privatizar sus órganos de servicio, lo que se pretende aplicar por igual en educación, con lo cual está atacando los fines sociales de la Universidad. El secretario ve a la Universidad desde el neoliberalismo, con fines capitalistas; evidentemente, la Universidad puede ser una carga social para el gobierno. Seguramente el secretario desconoce que el 70 por ciento de la investigación realizada en el país proviene de las universidades públicas.” Hasta aquí la mención.
A partir de entonces -según informes de investigación a los que aludiré posteriormente-, en las universidades públicas ha aumentado la dificultad para conseguir financiamiento y la expansión de la educación superior privada avanza a paso de galgo.
Ante esta situación actual, la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) tiene entre sus respuestas trabajar cotidianamente en pro de la excelencia académica. Teniendo como premisa la idea de que “Quien se atreva a enseñar, que nunca deje de aprender” (John Cotton), el binomio UAZ- SPAUAZ, a través de la Escuela Internacional de Verano, se ocupa de actualizar profesionalmente a su personal.
Tangencialmente aludo a los antecedentes de la misma. El 18 de febrero de 1978, la prensa local publicó que “En la UAZ deben implementarse los cursos de Maestría dentro de su programa permanente de formación de profesores, para estimular el desarrollo académico de la institución.” Lo anterior lo manifestó Raymundo Cárdenas Hernández, en su rol de secretario general del recién nacido SPAUAZ.
En ese sentido una acción concreta fue la creación de la primera Escuela de Verano realizada del 5 de julio al 6 de agosto de 1982. El rector de entonces era Jorge Eduardo Hiriartt Estrada. La organización de la misma estuvo a cargo del Director General de Servicios Académicos de la UAZ, Francisco García González. La temática abordó tanto aspectos didácticos como disciplinares. Impartieron los cursos docentes provenientes de la UNAM, el IPN y locales. Entre estos últimos cabe mencionar a Manuel Martínez Delgado y Domingo Cervantes Barragán.
La Escuela de Verano tuvo su origen en “el convencimiento que se abriga respecto a que la formación y actualización de los profesores es un punto clave, trascendente y crucial dentro de los planes de la institución”. “No verán en bancarrota académica a la UAZ” fue el espíritu de esa administración organizadora pionera.
Sin sufrir interrupciones, una vez institucionalizada, en 2006 el rector Alfredo Femat Bañuelos y el secretario general del SPAUAZ, José Francisco Román Gutiérrez, suscribieron el convenio para la realización de la Escuela Internacional de Verano. El rango de internacional lo adquirió en función de tener como docentes invitados a extranjeros.
Este esfuerzo de actualización docente va acorde con las políticas internas de la Institución comprometidas con el Modelo UAZ Siglo XXI, y lo pueden aprovechar tanto profesores universitarios como público interesado.
Al finalizar la rectoría de Armando Silva Cháirez, comprometidamente se está realizando la Escuela Internacional de Verano 2016, organizada y coordinada por Miguel Rodríguez Jáquez, secretario académico, y Marcelina Rodríguez Robles, Coordinadora de Docencia, del lado de la UAZ; y por Crescenciano Sánchez Pérez, secretario general, y Efrén González Ramírez, titular de Asuntos Académicos, por parte del SPAUAZ.
En otro rubro es destacable que el rector electo de la UAZ, Antonio Guzmán Fernández, con la finalidad de implementar proyectos que cristalicen en beneficio de la comunidad universitaria y de la sociedad, en días pasados se reunió con el gobernador electo Alejandro Tello Cristerna y con presidentes municipales en funciones y electos de Fresnillo, Jalpa, Jerez y Monte Escobedo.
Estudiantes de la Licenciatura en Turismo, participan en la Segunda Estancia de Desarrollo de Competencias en Ciudad de México. En la inauguración estuvieron José Francisco Román Gutiérrez, y Pedro Inguanzo González. El Rector Armando Silva Cháirez entregó reconocimiento al anfitrión Restaurante Arroyo.
Termino con una reflexión. El pivote del desarrollo social tiene como pieza maestra a la educación pública, única capaz de satisfacer las demandas que la democracia supone.
Así se observa el mundo desde El Mirador de Heródoto. ■
*Cronista de la UAZ
