El presupuesto es el criterio real de prioridades para el gobierno que inicia. Después de los discursos donde muchos temas parecen ser principales, al final del día, se observa la determinación en la propuesta del paquete económico entregado a la legislatura. A nivel federal se dio la consigna a los legisladores de la mayoría parlamentaria de no cambiar montos ni aprobar etiquetas para proyectos desde las comisiones parlamentarias. Es decir, se centralizó absolutamente la decisión sobre todo el presupuesto. En el caso local no sabemos cuál será la consigna, pero la necesidad de aprobar el refinanciamiento de la deuda obliga al bloque gobernante a negociar para lograr los dos tercios.
En términos gruesos, parece ser un presupuesto con incremento de más de 3 mil millones de pesos, donde los recursos dirigidos a aquellos órganos autónomos y poderes se ven reducidos. Podemos decir en espera de hacer un análisis más exhaustivo que La Sefin se vería más fortalecida para el Ejercicio Fiscal 2022, esto al pasar de mil 836 millones 768 mil 130 pesos que ejerció este 2021, a 2 mil 749 millones, 792 mil 176 pesos; la Secretaría de Obras Públicas pasó de ejercer 351 millones 400 mil 009 pesos a 953 millones 658 mil 525 pesos, es decir, un aumento de 171.4%; Seduzac en 2021 ejerció 10 mil 311 millones 270 mil 804 pesos y para 2022 se plantea que sea de 10 mil 796 millones 058 mil 023 pesos (4.7% más); La SSP de los mil 272 millones 808 mil 266 pesos que ejerció este año, se proyecta que para 2022 ejerza mil 677 millones 218 mil 194 pesos.
Sin embargo, podemos notar que existe una reducción bastante importante en el sistema de justicia al disminuir el presupuesto para el Poder Judicial y la Fiscalía justo cuando parte importante de la inseguridad se debe a la impunidad reinante. Si bien existen excesos por las abusivas pensiones de los ex magistrados; el paquete presupuestal puede incluir etiquetas específicas para fortalecer a un poder que, desde la llegada de Arturo Nahle, inició una etapa de crecimiento que requiere de recursos para agilizar la llegada de la justicia a los zacatecanos.
El estado de Zacatecas retrocedió de forma preocupante en la seguridad alimentaria, de 28 a 53 por ciento de la población dejó de tener seguridad en el acceso a la alimentación. Con el escalamiento de precios que ahora sufrimos, esa situación es más difícil. Por ello, el presupuesto deberá contemplar recursos para incrementar la soberanía alimentaria que, a la brevedad, mejore el acceso efectivo a alimentos de los zacatecanos.
En medio de los diagnósticos que existen, los diputados deberán elevar el nivel de debate en comisiones y el pleno para justificar alguna modificación del paquete económico. Lo peor que puede ocurrir es que la discusión sea de acusaciones estériles y silencio argumental, y al final de periodo, se apruebe la propuesta del Ejecutivo sin un diálogo de altura. La discusión del paquete económico debe llevarse a cabo a la luz del análisis del Plan Estatal de Desarrollo.
La forma en cómo ha iniciado la 64 legislatura es poco alentadora. No ha dado muestra de calidad en la participación parlamentaria o genuino interés en los problemas públicos. De acuerdo a esos antecedentes, lo más probable es que tendremos una aprobación del paquete económico por consigna y un debate con pocas luces. Ojalá y nos sorprendan. El jueves empezaremos a ver qué orientación toma el dictamen que deberán elaborar alrededor del documento propuesto por el Ejecutivo. El resultado de las deliberaciones y decisiones de estas semanas, serán determinantes para el resto del año, ahí la importancia de las mismas.
