Muchos Zacatecanos hemos tenido una cuna modesta pero la UAZ es generosa y nos ha dado las herramientas para competirle de tú a tú a las personas que nacieron en cuna de oro, nuestra universidad es parte de un circulo virtuoso donde todos aportan su granito de arena para que las nuevas generaciones tengan un futuro más decoroso: Las familias de hacen un gran esfuerzo para darle la oportunidad de estudiar a sus hijos, la universidad ofrece a los mejores profesores de forma gratuita y los jóvenes aportan sus ganas de superación para producir un modelo equidad que le otorga oportunidades a los que nacieron con dificultades.
La UAZ lleva décadas impartiendo educación gratuita de calidad, pero eso no significa que sea perfecta. Nuestra universidad ha cometido errores y la mejor forma de superarlos es reconociéndolos y enfrentándolos.
En este momento nuestra máxima casa de estudios enfrenta una crisis económica profunda, provocada por Gobiernos sin visión que no comprende que la educación pública de calidad es la mejor herramienta para superar la marginación, pero también por los excesos que se han cometido en la administración de los recursos de la Universidad.
Algunos universitarios han cometido el error de negar, minimizar y tratar de ocular los malos manejos que ocurren en la Universidad, piensan que al hacerlo defiende a la UAZ y al modelo de educación pública que representa, pero al ocultar la realidad, terminamos perjudicando a nuestra máxima casa de estudios.
Vienen tiempos muy difíciles para la UAZ y la única forma en que puede salir victoriosa es con el respaldo de los ciudadanos, por eso las autoridades universitarias tienen que dejar de comunicarse entre ellas y deben comenzar a comunicarse con los ciudadanos para que la sociedad se convierta en el respaldo que necesita la Universidad.
Con todo respeto para el Rector y su equipo, ya no pueden hablarle a la comunidad universitaria, necesitan hablar con la sociedad y necesitan ganar el debate en todas las tribunas, por eso urge que todos los cuestionamientos sean atendidos con absoluta transparencia. En ese sentido, la Universidad le debe una explicación amplia y detallada a los zacatecanos, sobre la participación de nuestra Universidad en la “estafa maestra”, un asunto delicado donde las autoridades universitarias han guardado silencio y han dejado la equivocada percepción de que la UAZ no tiene recursos porqué se pierden en la corrupción.
También es urgente que la Universidad abra de par en par su nómina y todos sus gastos, es información que por ley es pública, pero la manejan de una forma tan confusa, que han generado la percepción de que la Universidad está llena de aviadores, de asesores y de salarios abusivos. Además, es necesario que la Universidad haga cambios en los métodos de contratación, para que los puestos ya no sean negociados entre los familiares de los profesores universitarios, esa dañina costumbre, deja en evidencia el tráfico de influencias, le quita autoridad moral a nuestra Universidad y le quita méritos a los contratados que se ganaron su lugar con esfuerzo, porqué todo mundo supone que alguien “los metió”.
Además, se tiene que revisar el modelo económico-administrativo para que todo el dinero que ingrese a la Universidad sea transparentado, es tiempo de terminar de una vez por todas con ese rumor de que los directores manejan a su antojo el presupuesto de las unidades académicas.
Entiendo que al hacer estas cosas no se terminarán los problemas de la Universidad, porque en realidad se trata de una crisis más profunda, motivada por la falta de apoyo de la Federación y del Estado, pero al realizar estas acciones, la Universidad le demostrará respeto a los contribuyentes y convertirá a todos los ciudadanos en aliados de nuestra causa.
Mientras las autoridades universitarias insistan en hablarle únicamente a la comunidad Universitaria y sigan insistiendo en minimizar los problemas administrativos de la UAZ, seguirán generando una mayor desconfianza de la sociedad y el Gobierno seguirá utilizando ese sentimiento para evadir su responsabilidad, como lo hizo Jorge Miranda hace unos días, al regañar a los universitarios, pintándolos como incompetentes y necios, cuando en realidad, las gestiones de Alejandro Tello han sido un fracaso total.
A mí no queda duda de que aun con sus defectos, mi Universidad es la única alternativa de Zacatecas para superar la pobreza y la marginación, porque la educación pública de calidad es el camino al desarrollo, pero es tan grande la crisis, que no debemos hablarle a los convencidos, debemos hablar con aquellos que tienen dudas y demostrarles con hechos que por el bien de Zacatecas, todos debemos apoyar a la UAZ.
Y debemos entender que al esconder los problemas de la universidad aumenta la desconfianza de los ciudadanos y le entregamos pretextos al Gobierno para golpear a la UAZ y evadir su responsabilidad.
