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Ha sido reprobable el desbordamiento de violencia que se convirtió en actos vandálicos –con infiltrados o no-, el domingo anterior y que arrojó un saldo, hasta ahora, de 9 personas fallecidas, decenas de heridos, detenidos y desaparecidos en Nochixtlán, Oaxaca, durante el desalojo que llevaron a cabo elementos de la policía federal y estatal, disparando armas de fuego en contra de miembros de la sección 22 de la CNTE, que mantenían un plantón sobre la carretera en dirección a la planta Dovalí Jaime en aquella entidad, como protesta en contra de la reforma educativa.
Las protestas no son nuevas. Se han recrudecido desde hace tres años y medio, como resultado del Pacto por México que el día 2 de diciembre de 2012, firmó Peña Nieto con los representantes de los partidos políticos: Gustavo Madero Muñoz (PAN); Cristina Díaz Salazar (presidenta interina del PRI) y Jesús Zambrano Grijalva (PRD). Uno de 5 acuerdos fue, la creación de una sociedad de derechos y libertades, con educación de calidad y con equidad, impulsada mediante la presentación de una reforma legal en materia educativa con tres objetivos: aumentar la calidad de la educación básica, reflejándose en un resultado de las evaluación internacionales como PISA; aumentar la matrícula y la calidad de la educación media superior y superior y por último, recuperar la rectoría del Estado de Mexicano en el Sistema Educativo Nacional.
Así, el día 10 de aquel mes Peña Nieto, sin tomar en cuenta a los maestros como uno de los sujetos involucrados en el proceso enseñanza-aprendizaje, envió a la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, a través de Felipe Solís Acero, subsecretario de Enlace Legislativo de la Secretaría de Gobernación, la iniciativa de Reforma Educativa, y se anexó un documento firmado por los presidentes de los tres principales partidos nacionales.
En un proceso legislativo apresurado y al vapor, el 21 de diciembre, por 360 votos a favor, 51 en contra y 20 abstenciones, queda aprobada la reforma y se envió a las Legislaturas locales. Aprobándola el 6 de febrero de 2013: Chiapas, Baja California, Coahuila, Aguascalientes, Estado de México, Tamaulipas, Veracruz, Querétaro, Colima, Guerrero, Chihuahua, Nayarit, San Luis Potosí, Durango, Sinaloa, Hidalgo, Campeche, Yucatán, Baja California Sur, Jalisco, Zacatecas, Tabasco, Quintana Roo, Puebla y Nuevo León. El 7 de febrero el Senado la declaró constitucional.
Posteriormente, el 25 de febrero de ese año, fue promulgada por el Ejecutivo en compañía de los integrantes del Consejo Rector Pacto por México y Emilio Chuayffet Chemor, secretario de Educación Pública. Al día siguiente, el 26 de febrero, la reforma se publica en el DOF, y entró en vigor el 26 de agosto del mismo año.
Tal reforma no ha sido rechazada por el total del magisterio afiliado al SNTE. Pero sí por los maestros que pertenecen a la CNTE y que se encuentran en todas las entidades federativas, incluyendo a la nueva entidad Ciudad de México. Ante las protestas, Peña Nieto removió al secretario Chuayffet y nombró en su lugar al flamante actual secretario Aurelio Nuño Mayer, quien se ha caracterizado por su falta de sensibilidad ante un problema que ya se tornó, de inconformidad gremial, a una protesta nacional, debido a que este personaje no solo ha sido incapaz de controlar la violencia sino que atiza el fuego y arremete contra los maestros con despidos, persecuciones, detenciones arbitrarias, cárcel, hostigamiento laboral y ahora, promoviendo escenarios de suma gravedad, como ocurrió el domingo anterior.
México no merece esta guerra. En eso Peña Nieto involucró al país con el problema magisterial. Es directamente responsable de todo lo que ha venido provocando su amigo Aurelio Nuño, frustrado candidato presidencial 2018. Uno y otro, han demostrado no solo negligencia e incapacidad para atender esta situación, sino que su arrogancia y prepotencia las han sustentado en el uso de la represión, ante la ausencia de elementos y argumentos para justificar la reforma.
Nuestro país se encuentra muy desprestigiado mundialmente. Uno de los puntos neurálgicos, es la violación generalizada de los derechos humanos: Ayotzinapa, Tlatlaya, Tanhuato, Calera…
¿Qué la educación mexicana tiene problemas? ¡Claro que los tiene, y muy graves! ¡Tanto, que urge a la brevedad posible una reforma real
Buscando en la CPEUM, no encontré absolutamente ningún dato relacionado con la modificación de los planes y programas de estudio, con las técnicas y métodos de enseñanza. Tampoco lo referente a la infraestructura básica de la escuela principalmente de las aulas. Nada sobre textos, mobiliario y material didáctico. En cambio, el artículo 3° establece requisitos de la permanencia y condiciones laborales del docente. Y esto, es en realidad una reforma laboral y administrativa.
Gracias al repudio y exigencia de Estados Unidos y países europeos; Movimiento de los Médicos; de intelectuales; de universitarios; poder empresarial; eclesiástico; artistas; ONG y de otros, ha sido posible, a regañadientes de Nuño y con la actitud socarrona de Peña, que Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, el pasado miércoles diera inicio a las mesas de diálogo con los maestros de la CNTE, para detener el estado de barbarie que impera, principalmente en el Estado de Oaxaca. ■
¡Ojalá!
