■ En los espacios se instalaron contenedores de basura, que representan un foco de infección
■ Sólo algunas áreas cuentan con canchas y juegos a los que hace falta mantenimiento
Algunas de las áreas verdes que se encuentran en colonias nuevas como Las Quintas, en el municipio de Guadalupe, se encuentran en total abandono, y en algunas se han colocado contenedores de basura que generan un foco de infección.
Sin embargo, la mayoría no tiene contenedores y están llenas de basura, maleza, llantas, juegos oxidados y descompuestos, lo cual representa un peligro para los menores que acuden a estos lugares a divertirse.
Aunque estas áreas o plazas públicas representan un pulmón para las colonias, por los árboles y plantas que se siembran, los vecinos desconocen quiénes se tienen que hacer cargo de ellas, pues ni el ayuntamiento ni la empresa constructora han vuelto a revisar el problema.
Sólo algunas de estas áreas cuentan con canchas y espacios de esparcimiento. No así, la primera quinta que se construyó, que fue la San Jerónimo y que está abandonada por las autoridades.
En este espacio solamente hay algunos juegos viejos para niños. Un columpio y una resbaladilla, así como unas bancas destruidas y únicamente dos contenedores de basura.
Esto, además de dar mal aspecto, genera malos olores y es con lo que deben convivir los niños que salen a jugar. Además de que un vecino estaciona un tráiler al exterior del área verde. “Cómo dejan un lugar de área verde, con contendedores de basura, es ilógico”, dice Rocío, una de las vecinas.
Señala que los vecinos tienen la intención de mejorar el espacio, pero por cuestiones económicas les es imposible poder hacer rehabilitaciones e instalar una cancha, pero ni la constructora del fraccionamiento ni el ayuntamiento les dan respuesta.
En la quinta Santa Martha los juegos infantiles están oxidados sobre todo la resbaladilla, los columpios están desoldados. No hay zacate, sólo maleza crecida, algunos árboles y es todo. Además la basura está por todo el lugar.
“Dicen que aquí van a poner porterías y otros juegos, pero eso dicen los candidatos cada que vienen. Nos prometen canchas y mejorar la colonia cada que vienen, pero nada. Seguimos igual. Los niños juegan en espacios miserables”, dice Antonia, vecina de la quinta.
Agrega que en este tiempo, los contenedores son un factor de riesgo para la población, por el riesgo de que aparezca el mosquito de dengue, el cual se reproduce en el agua acumulada en este tipo de recipientes, así como en llantas. En otras quintas, como la de San Gabriel, hay una cancha de pasto sintético, área de juegos y de gimnasio. Así como de una pequeña pista para caminar.
