Fue convocado por la agencia y revista Cuartoscuro
Ser fotógrafo de prensa en México es hacer un viaje en tan solo un click al infierno. Muerte, sufrimiento, tristeza, son los sentimientos que se vislumbran en las fotos del día a día en los diarios, agencias y noticieros locales. La fotografía periodística desvela, profana y cimbra conciencias.
Ayer se llevó a cabo la premiación del Concurso Nacional de Fotografía Periodística y Documental a la que convocó la agencia y revista Cuartoscuro encabezada por el fotógrafo zacatecano Pedro Valtierra. El concurso con el mayor premio en el país que en esta edición dio prioridad a la fotografía periodística y documental a manera de tributo por la labor cotidiana de aquellos que colección la historia contemporánea del mundo.
En una Fototeca abarrotada de público, fotógrafos y amantes del arte de escribir con la Luz, el gobernador Alejandro Tello destacó además de la labor de Valtierra y la Fototeca, el trabajo de cada uno de los participantes, y sobre todo el rol que ocupa la imagen en la sociedad contemporánea. “Parece que todo sucede para culminar en fotografía”, dijo el mandatario citando a la ensayista estadounidense Susan Sontag, pues a través de la fotografía aprendemos a mirar.
Carlos Israel Gutiérrez Robles, del Estado de México, fue el ganador del primer lugar por su fotografía “Explosión en Tultepec”, tomada el 20 de diciembre de 2016 tras una serie de detonaciones de material pirotécnico que destruyó el mercado de fuegos artificiales San Pablito, considerado el más grande de su tipo en el país, tragedia que dejó 41 muertos.
Gutiérrez Robles, fotógrafo freelance, disparó más de 300 veces dice, pero la imagen que capturó, en el mercado cerca de su casa, es la que sintetiza la dimensión de la tragedia. Por una parte los heridos de muerte, por la otra, la solidaridad del pueblo mexicano. En primer plano se observan unos brazos sosteniendo el cuerpo de una persona cuyo rostro fue devorado por el fuego, en segundo, jóvenes sin playera cargan también el cuerpo, al parecer de una niña, al que el accidente le cambio la vida para siempre.
El segundo lugar fue para Sergio Hernández Vega, de Veracruz, por su imagen “Vestigios de vida y muerte”, la cual retrata el momento en que un integrante de la Brigada Nacional de Búsqueda de Desaparecidos saca un fémur de una fosa clandestina en la comunidad de San Rafael Calería, Córdoba, en 2016.
La foto, de un encuadre preciso y realizada con un objetivo luminoso, es una de pocas, pues el fotógrafo, ese cazador paciente, espero a que apareciera el perito con un hueso grande, que desmintiera las versiones de las autoridades de Veracruz, de que eran huesos de perros. Error. Los humanos son los únicos que tenemos un fémur, dice Hernández Vega. El periódico La Jornada nacional la publicó sólo para seguir abonando a la colección de imagen es del horror que es este país.
El tercer lugar fue para Jacob de Jesús García Maza, de Chiapas, por su fotografía Realidad en llamas, imagen que muestra el instante en que Agustín Gómez Pérez, joven campesino de 21 años, se inmoló frente al Congreso del Estado en la capital chiapaneca para exigir la liberación de su tío Florentino Gómez Girón, líder campesino que se encontraba preso en el penal de El Amate en Cintalapa, acusado de robo de ganado desde el 1 de mayo de 2014.
Jacob, con voz baja y un típico acento del sureste mexicano, cuenta que estando en el lugar tomó aproximadamente 30 fotografías, de la cual seleccionó una serie “dura” que envió al concurso pero únicamente le tomaron en cuenta ésta.
El dilema de Jacob fue grande, de denominación cristiana le dolió ver cómo una hermano sufría de tal manera, sin embargo la misión del fotógrafo de prensa lo mantuvo firme, con el ojo en el visor esperando el momento decisivo del disparo. Lo logró, un rostro indígena marcado por el grito del dolor envuelto en un fuego incandescente, mientras los presentes no saben si asombrarse o ayudar.
Pero la historia de Jacob no termina ahí, después de esa foto durísima que además es la portada de la nueva revista Cuartoscuro, la injusticia laboral le cobró factura, pues fue cesado del periódico donde laboraba en Chiapas por recorte de personal y sin derecho a liquidación. Pero no importó, ahora labora en otro diario y en su historia cuenta ya con un tercer lugar nacional por una imagen que bien valía el primero.
El jurado estuvo integrado por los fotógrafos Mónica González Islas, Isaac Esquivel Monroy y Humberto Muñiz Ceja, quienes deliberaron en las instalaciones de la Fototeca de la ciudad de Zacatecas el día viernes 13 de abril de 10 a 20 horas.
El jurado consideró importante resaltar la participación de fotógrafos de diversos estados de la República que han dado seguimiento a temas de coyuntura como el desplazamiento interno, la desaparición forzada, la crisis migrante, búsqueda de personas desaparecidas, contaminación y el acierto en la cobertura de noticias del momento.
Asimismo, otorgó cinco menciones honoríficas a José Eduardo Carrillo Lara y Pedro Ramón Mera Olguín, de la Ciudad de México; Jeoffrey Guillemard, de Chiapas; Yael Esteban Martínez Velázquez, de Guerrero, y David Eliud Gil Samaniego Maldonado, de Baja California.
Así, el certamen anual busca fomentar la producción fotográfica creativa, así como generar espacios de difusión y premiación a la fotografía mexicana de calidad. En su edición 2018, se recibieron 4 mil 472 fotografías, provenientes de 861 fotógrafos de toda la república mexicana.
Los premios consisten en 75 mil pesos y una cámara Nikon D750 con un objetivo 24- 120 mm para el primer lugar; el segundo recibirá 50 mil pesos y una cámara Nikon D610 con un objetivo 24-85 mm, y al tercero le corresponden 30 mil pesos y una cámara Nikon D7200 con un objetivo 18-140mm.
Además, los ganadores y seleccionados forman parte de la edición 150 de la revista Cuartoscuro y de una exposición fotográfica que se inaugurará el 14 de junio del presente en la Fototeca de Zacatecas Pedro Valtierra en el marco de la premiación del certamen y de la entrega anual del Premio a la Trayectoria 2018, que consiste en una cámara de plata.
Este año, el galardón se otorgará al fotógrafo estenopeico Jorge Camarillo, de Aguascalientes, por sus contribuciones al desarrollo y la enseñanza de la fotografía y de los procesos antiguos en México.
Este reconocimiento se otorga desde 2009, y quienes lo han recibido son Carlos Jurado (2009), Julio Mayo (2010), Víctor Monroy (2011), Rubén Pax (2012), Enrique Metinides (2013), José Hernández-Claire (2014), Christa Crowrie (2015), post mortem a Manuel Becerra Acosta (2016) y Rebeca Monroy (2017).
Desde su fundación en 1986, Cuartoscuro se ha dedicado tanto a retratar el país, como a apoyar la creación fotográfica, periodística y documental en México. Asimismo, ha abierto espacio a 2 mil 795 fotógrafos que han publicado su trabajo en las páginas de la revista a lo largo de 25 años.
A partir de 1998, Cuartoscuro ha convocado 34 concursos tanto nacionales como a nivel mundial. Entre ellos, destacan el 1er concurso de Fotografía Interuniversitaria El sentido de los elementos, en 1999; el concurso de Fotografía Juvenil de Zacatecas, en 2005; Migración, en 2007; Las artesanías y el arte popular de Zacatecas, en 2008; Agua, en 2012; Identidad América Latina, en 2016; El Tiempo, en 2017, por mencionar algunos.
