19.2 C
Zacatecas
viernes, 26 abril, 2024
spot_img

Te lo dije

Más Leídas

- Publicidad -

Por: ALBERTO HUERTA* •

La Gualdra 311 / Río de palabras

- Publicidad -

 

 

Para Ana Coronado Chiw por su cumpleaños

 

El Chamoy oculta su mirada tras unas gafas oscuras. Te lo dije, te lo dije y te lo repetí un titipuchal de veces. De un modo y de otro. Ya hasta parezco disco rayado. Pero a ti te vale. ¿Cómo quieres que te lo diga? Pero no me haces caso. Te entra por un oído y te sale por el otro. Y así nomás no se puede, mi alma. Mago lo mira con sorpresa. No me digas que te estoy gritando. Siempre la misma canción. Que te gritoneo. Y yo a nadie le grito. ¿Me oyes? A nadie. Yo relax. Con un gallo mañanero tengo. Todo el día ando relax. La moi me relaja. Sí, porque es natural, como los huevos de rancho y las papas de campo y la leche bronca. Dos… tres jalones después del refine y a jetear la siesta a pierna suelta. Un churro en la noche y a planchar oreja hasta el otro día. Uf, la gloria. Te lo dije. A huevo que sí. A huevito. Pero tú sólo les haces caso a tus amigochas. Pero mira, hay un Dios. Hay un Dios. A ver si ellas te van a sacar de un apuro chancho. ¿Cómo quieres que me consiga un jale de las de acá? Siempre ando con la chompeta llena de preocupaciones. De mala vibra. No, pero sí te lo dije. Pero tú necia, terca, amachada. Bien negativa. Clavada en la mala onda. En el mal pedo. Y no vayas a llorar. Te la pasas gimiriquiando, sorbiendo el moco. De la mano del Chamoy se resbala el cuchillo cebollero. Mi jefecita me deja que suba a la azotea de su cantera a que le queme las patas a Cuauhtémoc a la sombrita del negro del agua. Si eres feliz atizando… Llégale, eso dice mi jefita. Te prefiero pachecote que joto. ¿Qué no piensas? Así, tantito, nomás lo necesario. A mí los quetos me dan claridad, sosiego… Porque es natural, como el jocoque, el tequila… naturalito. Pero no, a todo le pones peros. Y ai es donde la puerca torció el rabo. Y no me vayas a decir que no te lo dije. Sí te lo dije un madral de veces. Hasta yo me caigo gordo. Repite y repite. Y tú, soreca. Y no me vayas aponer cara de mártir, porque para mártires… los de Chicago. Y ya te dije: la grifa me armoniza… le da paz a mis furias… me desapendeja… tranquis… En la buena onda. Acá, machín. ¿De qué te quejas? Si eres la reinita. Jodida tu comadre Luca. A ella su marido le salió puñal y pisto. Yo cansado de decírtelo en buena onda. No me vengas con mamadas, porque te lo dije. Verdad de Dios que te lo dije. Y te lo repetí. Porque yo sí me preocupo por ti. ¡Mírame! ¡Mírame! Y no te estoy gritando. Yo no grito. No andes diciendo que te grito. Porque no tengo necesidad de gritar. La buena onda… ¿qué no? Mago, la mujer del Chamoy, tiene gacha la cabeza y los brazos le cuelgan a los lados, como los de una muñeca de trapo.

 

https://issuu.com/lajornadazacatecas.com.mx/docs/la_gualdra-311

 

- Publicidad -
Artículo anterior
Artículo siguiente

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -