■ Afirman que con las cuotas y aportaciones de los derechohabientes se puede sostener a los jubilados, siempre y cuando se corrijan los desvíos y la corrupción en el instituto
Trabajadores de la Benemérita Escuela Normal Manuel Ávila Camacho (Benmac), acompañados por la diputada Alma Dávila Luévano, realizaron una manifestación este martes para expresar su rechazo y desacuerdo a la iniciativa de reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado de Zacatecas (Issstezac) entregada a la Legislatura por Gobierno del Estado.
La legisladora del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) reiteró que esa iniciativa provocaría diversas afectaciones a los trabajadores, entre ellas un aumento de años de servicio para acceder a la jubilación y el aumento del 12 al 16 por ciento de las cuotas y aportaciones de los derechohabientes.
“Para nosotros, las matemáticas son simples y con las cuotas y aportaciones de los derechohabientes se puede sostener a los jubilados, pero siempre y cuando se corrijan los desvíos, la corrupción que hay dentro del instituto”, expresó.
Por ejemplo, dijo que, si los 900 trabajadores que no se justificaban en el Issstezac y si esta nómina hubiese sido reducida, desde el 2015 hasta el momento se pudo ahorrar 545 millones de pesos, y si el área de cobranza hubiese cobrado todos los préstamos, se habrían recuperado 500 millones de pesos más.
Dávila Luévano también comentó que hace dos años el área comercial aún generaba ganancia, pero desde el 2020 hubo un pique que derivó en números rojos, lo que muestra que la función que le encomendaron al director Marco Vinicio Flores Guerrero es “acabar con el área comercial para venderla a precio de no funcional”.
Indicó, entonces, que son muchos los temas que se pueden analizar en el Issstezac y que no se justifican en la iniciativa de ley del gobierno del estado, mientras quela iniciativa que ella presentó en noviembre pasado plantea cómo se puede resolver la problemática en el instituto.
Por su parte, los trabajadores de la Benmac que se manifestaron recordaron que en el 2015, cuando se aprobó la última reforma a la ley, les aseguraron que habría garantía de no amentar las aportaciones al menos hasta el 2028 y que eso le daba viabilidad al instituto, pero apenas “pasaron 5 años y ya tenemos una cantaleta más grave que es que no están garantizadas nuestras pensiones”.
Además, mencionaron que hay trabajadores que intentaron hacer sus trámites de jubilación y no les aceptaron los documentos, a la espera de que se apruebe y aplique la nueva ley, por lo que exhortaron a los diputados a que no avalen una reforma tan lesiva contra los derechohabientes.
Señalaron que el aumento de las cuotas del 12 al 16 por ciento afectaría mucho a los trabajadores porque, además, les descuentan el ISR y otros conceptos que podrían lesionarlos hasta en 50 por ciento sus ingresos quincenales.
“Le pedimos a los legisladores su sensibilidad para abrir mesas de diálogo. Entendemos que hay la necesidad de reformar el Instituto, pero esta reforma no debe ser basada en el aumento de cuotas a los trabajadores. Debe ser integral y debe revisarse la estructura administrativa que tienen para sanearla”, concluyeron.
