Maestros disidentes tomaron las instalaciones de Ciudad Administrativa para continuar con las actividades en rechazo a la reforma educativa.
Aunque la demanda de abrogar la reforma es de carácter nacional, exigen que el Gobierno del Estado atienda algunos aspectos tales como la reintegración del salario retenido a cinco maestros, a quienes finalmente no se les separó del Servicio Profesional Docente.