■ Mi proyecto para la Universidad se basa en la estabilidad, calidad y pertinencia: Guzmán
■ Un objetivo, lograr el reconocimiento de todas las plazas que no respalda la Federación: Aréchiga
En el primer debate realizado entre candidatos a la Rectoría de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Carlos Fernando Aréchiga Flores acusó a Antonio Guzmán Fernández de “cargar con la losa” de los grupos políticos, mientras que el abanderado de la planilla IDEA replicó que el aspirante de Universitarios Libres propone reducir sueldos y prestaciones de los funcionarios, pero nunca renunció a ello mientras ocupó la dirección de la Unidad Académica de Veterinaria y Zootecnia.
Aréchiga Flores manifestó que el problema de la otra planilla no es su candidato, sino de los grupos políticos que están detrás y cuyas administraciones en el pasado han provocado la crisis institucional. “Se trata de manejar los recursos con responsabilidad, no generar plazas para los compas ni crear espacios por crearlos”, sostuvo.
En respuesta Guzmán Fernández declaró que el otro candidato nunca renunció a su salario ni prestaciones como funcionario, por lo que es incongruente que ahora proponga reducir esos conceptos. Incluso, refirió que en el Consejo Universitario nunca presentó una propuesta de ese tipo y nunca presentó declaración alguna sobre el financiamiento que recibió en su escuela.
En su caso, dijo que fue el primer secretario general del Sindicato de Personal Académico (Spauaz) que audita el fondo de ahorro de los profesores, cuyo monto ya es de 300 millones de pesos. Asimismo, declaró que “no tengo la capacidad de coacción que sí tiene la otra planilla”.
Al respecto, el candidato de Universitarios Libres respondió que, como director, no tuvo un salario muy alto, por lo que reiteró su compromiso de reducir la percepción de los funcionarios de primer nivel, es decir, de la Rectoría, porque en esos casos los montos son estratosféricos.
La primera parte del debate consistió en dar a conocer la trayectoria de los candidatos. Aréchiga Flores comentó que fue ganador del premio de los mejores estudiantes de México, lo que le permitió acceder a becas. El posgrado lo cursó en la Universidad de Florida, Estados Unidos, y después se incorporó a la docencia en la UNAM y después a la UAZ.
Expuso que ha fungido como director de Veterinaria por dos periodos y fue la primera unidad académica de la UAZ en ser evaluada por los Comités Interinstitucionales para la valuación de la Educación Superior y de llegar a la Rectoría buscará una mayor vinculación con la sociedad, trato respetuoso con las autoridades para que la Universidad tenga la autoridad moral para exigir recursos.
Guzmán Fernández, por su parte, mencionó que cuenta con maestría y doctorado por la UAZ y que esta podría ser la primera vez que un profesor salte directamente a la Rectoría sin pasar previamente por la administración central.
Señaló que la comunidad universitaria ha construido una institución a la altura de las circunstancias históricas, y ante la actual problemática, indicó que todos deben trabajar para cimentar el futuro de la UAZ, ello a partir de la construcción de acuerdos entre las diversas expresiones al interior de la institución.
Su proyecto para la Universidad, dijo, se basa en la estabilidad, calidad y pertinencia, además de propiciar el compromiso de toda la comunidad universitaria para encontrar una solución de la problemática financiera y administrativa sin la intervención externa.
En ese sentido, el ex dirigente sindical informó que el adeudo de la UAZ al ISSSTE es de mil 300 millones de pesos y cada año tiene un déficit de 400 millones de pesos, por lo que es necesario un reajuste presupuestal.
Ante las dificultades para cumplir con los compromisos contractuales de los sindicatos, propuso realizar un diagnóstico serio, colectivo, para conocer el estado real que guarda la Universidad y a partir de ello conformar un frente para llevar a las instancias correspondientes la demanda de un mayor subsidio.
Guzmán Fernández exhortó a poner a la UAZ por delante y por encima de cualquier interés que vaya contra su misión social, porque de lo contrario estará en juego la viabilidad de la institución.
Señaló la necesidad de diseñar un organigrama en el que se establezcan las funciones en todos los ámbitos de autoridad personal y colegiada, con el objetivo de lograr un mejor ordenamiento y más eficiencia de las funciones administrativas.
Se comprometió a transparentar los gastos y percepciones de los funcionarios, trabajar en defensa de la autonomía y rendir cuentas sobre el ejercicio del presupuesto e implementar presupuestos anuales en todas las unidades académicas.
Aréchiga Flores afirmó que la crisis financiera se debe a que las administraciones anteriores han manejado mal los recursos y “son ellos mismos los que quieren seguir teniendo los hilos de la institución”. Por el contrario, propuso que los sueldos de los funcionarios sean reducidos y buscar la manera de sanear las finanzas mediante un plan de desarrollo para los próximos 30 años.
Dijo que es necesaria la gestión en todos los niveles de poder y una mayor coordinación con las autoridades, pero “no vamos a entregarnos a los partidos políticos comprometiendo a la Universidad como ya se está haciendo”.
También señaló que uno de sus objetivos será lograr el reconocimiento de todas las plazas que en este momento no están respaldadas por la Federación, pero también la generación de condiciones de igualdad para los docentes, ya que hay algunos que trabajan dos horas los sábados y cobran tiempo completo.
Otras cosas que se deben combatir, añadió Aréchiga Flores, son los compromisos con padrinos políticos, con partidos e incluso con campañas externas a la UAZ, además de atender el tema de la generación de recursos propios mediante los cuales sea posible paliar el déficit presupuestal.
En el tema de desarrollo académico, Aréchiga Flores manifestó la necesidad de una relación más cercana y dinámica con todos los actores sociales, y al interior de la UAZ una mejor relación entre las coordinaciones de investigación, docencia y extensión.
Desde su punto de vista, se requiere de un nuevo Foro de Reforma para definir si continúan las áreas académicas o se busca otro modelo académico. “No se puede seguir simulando porque van 17 años del último foro, las áreas ya no funcionan y son obsoletas”.
Sugirió además la articulación de las unidades académicas con su entorno, es decir, su relación con las necesidades de cada región, además de la creación de una red de universidades del centro norte de la República para que resuelva problemas concretos mediante investigaciones.
Guzmán Fernández, por su parte, comentó que se debe diversificar la oferta académica, consolidar las manifestaciones artísticas y culturales y lograr un mayor reconocimiento social a través de esquemas de vinculación.
Además, refirió que su proyecto busca el fortalecimiento de la docencia, la consolidación de la investigación, transparencia en la gestión académica y administrativa, así como un Plan Estratégico de Investigación y Posgrado para mejorar la capacidad académica y su vinculación con los sectores productivos y un programa estratégico para la extensión universitaria.
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