■ Autoridades siguen pasivas ante el problema ambiental que afecta a la comunidad
■ La empresa aceptó que hace dos años realizaba descargas con la anuencia de la Conagua
Sin solución se encuentran los habitantes de la comunidad Laguna Blanca, luego de que denunciaran hace más de dos meses la contaminación del cauce del río del lugar con aguas residuales provenientes del colector Américas. Atribuyen la muerte de algunos de sus animales a la presencia de metales pesados en el agua estancada, provenientes de las descargas de la empresa minera Saucito, localizada en la comunidad El Poleo.
Las acciones, a decir de los afectados, han sido muy lentas y advierten que en caso de no actuar oportunamente, el agua contaminada continuará en aumento y pudiera llegar a comunidades aledañas como El Obligado y Carrillo, donde también se verían afectados campos de cultivos, animales y caminos que conectan a las localidades.
Aunque la presencia tanto de autoridades municipales como estatales fue oportuna al momento de efectuar la denuncia, el caso se ha quedado en el abandono y sin solución para frenar la contaminación del sitio que desde hace más de dos años recibe las aguas residuales de la parte poniente del municipio.
La comunidad de Laguna Blanca se encuentra a 15 kilómetros de la cabecera municipal; ahí habitan cerca de 20 familias, con menos de 100 habitantes, y se encuentran establecimientos como un aserradero y una empresa de materiales para la construcción que se han visto afectados por la invasión de aguas contaminadas. Varios campesinos han perdido sus tierras de cultivo y algunos animales de traspatio.
En torno a los hechos, la presidenta de la Comisión de Ecología y Medio Ambiente, Guillermina Alonso Ramírez, aceptó que el municipio ha descuidado varios aspectos relacionados en el tema ambiental como son los dos casos donde se presume que la empresa Minera Saucito, propiedad de Alberto Bailleres González, ha sido responsable de incidentes con impacto ambiental.
Alonso Ramírez lamentó que el municipio carezca de un reglamento actualizado para emitir sanciones a ésta y otras empresas que han provocado daños ambientales al municipio, resaltando que desde 2004 no se hace ninguna modificación al reglamento de ecología y ambiente, por lo que no pueden actuar.
También indicó que la titular del departamento de Ecología y Medio Ambiente, Karla Gómez, ha actuado de manera pasiva ante la problemática ambiental debido a que ha tenido que ausentarse por estado de gravidez y los problemas ecológicos en el municipio han quedado en el olvido.
Precisó que ha solicitado una audiencia con el presidente municipal de Fresnillo, Gilberto Eduardo Dévora Hernández, para analizar la posibilidad de que se actualice el Reglamento de Ecología vigente desde 2004, además de hacer cambios en el titular del departamento; sin embargo, hasta la fecha no ha obtenido respuesta.
Antecedente
Habitantes de la comunidad exigieron la intervención de las autoridades municipales para atender la denuncia que desde hace más de dos años afectó con mayor magnitud su lugar de origen, problemática que se agudizó con las lluvias registradas en la región el presente año, y como medida de presión amenazaron con paralizar las actividades del palacio municipal.
En aquel entonces, los afectados de la comunidad informaron que perdieron campos de cultivo y animales de traspatio, además de que el camino que conduce a la escuela primaria Cuauhtémoc estaba a metros de ser alcanzado por el agua contaminada. Estudiantes afectados son testigos del incremento del cauce, que se torna de color verde y emite olores fétidos.
Derivado de una investigación se descubrió que ante la falta de una planta tratadora de aguas residuales, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) autorizó que se vertiera las descargas en este sitio conocido como Colector de Aguas Residuales Las Américas, pero los incrementaron al punto de ocasionar daños hacia los habitantes, esto sin mencionar los focos de infección que se han presentado por el estancamiento del mismo elemento.
También se informó que fue reportada la ruptura de uno de los tubos que desemboca en el colector de aguas residuales, el cual desde hace dos años presentó daños, y que por motivos desconocidos hasta el momento no ha sido reparado.
Los mismos habitantes revelaron que incluso la compañía minera Saucito, ubicada en la comunidad de El Poleo, también desemboca las aguas de mina en este lugar, motivo por el cual solicitaron una audiencia con los directivos de la empresa extractora para que informaran acerca de los permisos necesarios emitidos por la Conagua para ejecutar la descarga de líquidos o de lo contrario regular la situación.
En una reunión donde se concentraron autoridades municipales, estatales y los presuntos responsables de la contaminación, representantes de la empresa minera reconocieron que hace dos años aproximadamente dejaron de verter las aguas que se extraen de las minas y se deslinaron del problema ecológico que se tienen en el lugar.
Para determinar posibles responsabilidades, autoridades municipales ordenaron hacer un estudio acerca de los elementos contaminantes que presenta el agua para descartar o confirmar que la empresa Minera Saucito es la responsable de los daños ecológicos que afectan a la ciudadanía.
Sin embargo y a más de dos meses de que se ordenó examinar los componentes del agua de Laguna Blanca, los inmiscuidos en el tema aun no obtienen los resultados; justifican que la titular del departamento de Ecología y Medio Ambiente, Karla Gómez, se ausentó de sus actividades sin dar a conocer los resultados del mismo y esto evita que se avance en cuanto al tema.
Segundo caso de contaminación
En caso de que el estudio realizado a las aguas residuales que afectan a la comunidad evidencie la presencia de metales pesados y sean estos los que originen la contaminación de la zona poniente de El Mineral, el municipio se vería imposibilitado para emitir una sanción en contra de la empresa metalúrgica por no tener sustento legal actualizado.
Situación similar se presenta en el siniestro que ocurrió el pasado domingo 6 de diciembre, cuando la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que la empresa minera instalada en la comunidad Saucito del Poleo había provocado el derrame de 450 toneladas de jales que se esparcieron por territorio de la misma mina e invadieron la parcela aledaña de un particular.
Cabe mencionar que de resultar positivo el dictamen de estudio del agua por la presencia de metales pesados, sería la segunda ocasión en lo que va del año en la que se ve involucrada la empresa minera propiedad de Alberto Bailleres González, el segundo hombre más rico del país, según reconocida revista, y quien recientemente recibió por parte del Senado de la República, entre polémica, la medalla Belisario Domínguez.
