■ El Mirador de Heródoto
Conmemorar: “Recordar solemnemente algo o a alguien, en especial con un acto o un monumento. //Celebrar una fecha importante”
Diccionario de la Lengua Española (RAE).
Vaya nuestra felicitación para Corre, conejo, una destacada revista literaria que acaba de cumplir 18 años de trayectoria ininterrumpida. En términos coloquiales, ha llegado a su mayoría de edad. Esta revista mensual y de distribución gratuita se ha distinguido en Zacatecas por su forma y contenido, es decir, es una revista especial porque tiene un formato especial, un tamaño especial, un color de papel especial y el espíritu de sus colaboradores también es especial, entre los que se encuentran Maritza M. Buendía, Carmen Fernández, Arturo Burnes Ortiz y Marco Antonio Flores Zavala, entre otros. Felicidades su director, el poeta José de Jesús Sampedro, a sus auspiciadores y al gran equipo editorial que hacen factible este proyecto. Entre los méritos de esta revista está el que ha contribuido a formar en la comunidad una cultura del análisis y crítica literaria.
Punto y aparte continuaremos comentando a modo de relámpago lo referente al 49 cumpleaños de nuestra Máxima Casa de Estudios, que será el próximo 6 de septiembre, y al preludio de los preparativos para la conmemoración del 50 aniversario de la institución.
El arribo de nuestra alma mater a su cincuentenario es una oportunidad que aprovecha el rector Antonio Guzmán Fernández para encabezar todo un programa conmemorativo, que dará a conocer una vez entregado su primer informe de gestión administrativa. Es su intención hacer propicia la fecha para facilitar la formación de una mayor conciencia histórica entre los universitarios, haciendo memoria conjunta de dónde venimos, de recordar el pasado, de reflexionar sobre su trayectoria y su significado en el contexto regional y con su gente, y también abordar lo referente al diseño de nuestro porvenir. Se trata de aprovechar la efeméride para fortalecer los lazos entre la UAZ y la sociedad a la que sirve. Con ello se aspira a que dentro de un año podamos iniciar con renovado prestigio ante los zacatecanos el segundo medio siglo de nuestra querida institución.
En esta atmósfera de retrospección histórica motivada por el ya no tan lejano 50 aniversario de la Universidad Autónoma de Zacatecas, es estimulante constatar el interés que ya empieza a despertar en la comunidad académica, a la par que se preparan además los aniversarios de fundación de otras instancias también cincuentenarias, como la Unidad Académica de Medicina Humana y el Programa de Ingeniería Mecánica.
Desde luego, en este espacio periodístico también recordaremos el camino institucional recorrido, como un modo de reconocimiento entrañable a las personas que han contribuido de manera significativa a su crecimiento y posicionamiento como una institución de excelencia que promueve el desarrollo integral de sus estudiantes, formando profesionistas competentes y con vocación de servicio social.
Obviamente, como los datos que aquí se expresen serán insuficientes para comprender este fenómeno histórico en su justa medida, analizando todos los vectores que la atraviesan como institución y poniendo en valor las aportaciones de sus protagonistas, invitamos a los amables lectores a acercarse a los múltiples libros publicados como resultado de arduas investigaciones históricas sobre la UAZ, cuya autoría corresponde a José Enciso Contreras, José Luis Medina Lizalde, Manuel Martínez Delgado, Francisco García González, Olivia Hernández Aguilar, Eduardo Remedi, Abel García Guízar, Mariana Terán Sifuentes, Francisco Valerio Quintero, entre otros muchos.
Por nuestra parte, en esta ocasión únicamente destacamos que el antecedente indispensable para que sucediera el surgimiento de la UAZ fue el logro de la autonomía del Instituto de Ciencias de Zacatecas (ICZ), mismo que el 10 de octubre de 1959, mediante el controvertido decreto número 3 publicado en el Periódico Oficial del 24 de septiembre de 1959, obtiene su estatuto de autonomía y queda establecido como Instituto de Ciencias Autónomo de Zacatecas (ICAZ) para iniciar su nueva identidad en 1960. La autonomía considerada como uno de los elementos centrales de las instituciones de educación superior, representa una de las mayores fortalezas y es señal de identidad y compromiso social. Lograrla constituyó un momento estelar para la institución.
De inmediato, en el ICAZ surgió la aspiración por convertirse en universidad y finalmente el empeño rindió frutos. El H. Congreso del Estado emitió el decreto 496, con inicio de vigencia el 6 de septiembre de 1968, cuyos artículos iniciales textualmente dicen:
“Primero. Se declara la conversión del Instituto de Ciencias Autónomo de Zacatecas, en Universidad Autónoma ‘Francisco García Salinas’.
Segundo. La Universidad Autónoma ‘Francisco García Salinas’, es una institución descentralizada del Estado, que gozará de plena autonomía académica y administrativa, regida por los principios de libertad de cátedra e investigación, los cuales serán orientados con un alto sentido social”. Así nació una gran universidad para una gran ciudad.
Posteriormente en esta columna que contribuye al fortalecimiento de la identidad y el orgullo universitarios, recordaremos la trayectoria de la UAZ, aludiremos al contexto social en el que se obtuvo la autonomía, las causas que la generaron, así como sus repercusiones, las cuales han sido trascendentes. Mientras tanto, tengamos en mente que el cincuentenario de la UAZ viene. Comienza un nuevo desafío.
Así se observa el mundo desde el Mirador de Heródoto. ■
*Cronista de la UAZ.
