■ Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos reclama justicia y protección para el gremio
En lo que va del año, nueve periodistas han sido asesinados en el país, de los cuales uno era zacatecano: Nolberto Herrera Rodríguez, camarógrafo, reportero y editor en el Canal 9, informó la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos a través de un comunicado emitido este martes.
La Asociación Civil enumeró los nueve casos con sus respectivos relatos de lo acontecido. La lista comienza con el homicidio, el 2 de enero, de Miguel Ángel Guzmán Garduño, columnista de un diario de Chilpancingo, Guerrero; sigue con Gregorio Jiménez de la Cruz, reportero de un par de periódicos de Veracruz, quien “fue secuestrado de su propio domicilio y llevado a Las Choapas, donde fue asesinado y enterrado en una fosa clandestina”, detalla el documento.
La enumeración de nombres y de historias continúa con Omar Reyes Fabián, Jorge Torres Palacio, Marlene Valdez García, Adrián Gaona Belmonte, Víctor Pérez Pérez y Raúl López Mendoza. Respecto al asesinato del zacatecano, el boletín señala que el cuerpo de la víctima fue hallado en su casa por familiares, presentando al menos 20 heridas provocadas por un arma punzocortante.
Asimismo, se recuerda que Alfredo Valadez, jefe de información de Canal 9 y corresponsal en el estado del diario nacional La Jornada, aseguró que Herrera Rodríguez era “muy trabajador, una persona muy activa, porque además de producir un noticiero salía a reportear información general y cultural”.
La asociación de periodistas lamentó que la Procuraduría de Justicia del Estado de Zacatecas, “sin mayor averiguación”, dice el comunicado, arguyó que el posible móvil del crimen era pasional.
Así, la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos insistió en el hecho de que no puede continuar la impunidad que prevalece en el país, “por omisión o complicidad de algunas autoridades”. En ese sentido, enfatizan, “redoblamos nuestro reclamo de justicia y de que se implementen los mecanismos de protección a los periodistas, trabajadores de prensa, de sus familiares y amigos que también han sido víctimas en hechos, inclusive directos, para amedrentar a los comunicadores”.
