La Universidad es un tema de todos y para todos. Todos tenemos que ver con ella, y ella tiene que ver con nosotros. Ha formado, forma y formará a varias generaciones. Aún aquellos que aparentemente no tienen nada que ver con la Universidad han recibido los servicios profesionales de alguno de sus egresados, han sido gobernados por universitarios o han disfrutado de la cultura o el arte que en ella se genera. Pero más aún, se nutren y forman parte de la conciencia colectiva que tiene como fuente a nuestra alma máter.
Palabras del diputado Félix Vázquez Acuña
en sesión solemne del 5/11/2007
El 19 de febrero de 2019 ha quedado escrito en las páginas de la historia de nuestra Universidad Autónoma de Zacatecas y en nuestros corazones como el día en que se le otorgó un merecido reconocimiento con la declaración de “Benemérita”. Para los que participamos en el proceso, es una gran satisfacción.
Para recordar esta representativa y significativa historia, quiero hacer un recuento de los hechos: Era mayo del 2018 cuando la entonces diputada Iris Aguirre Borrego, encargada de la Comisión de Desarrollo Cultural de la LXII Legislatura, nos entregó a los cronistas del estado un reconocimiento por la labor realizada en pro del fomento de la memoria histórica de nuestros espacios.
Aproveché entonces la oportunidad para hacerle la solicitud de la nominación de la UAZ como benemérita, llamar al año 2019 como año de la BUAZ y rectificar la Alameda como Alameda Francisco García Salinas.
Posteriormente, en su oficina del Congreso, presenté las propuestas fundamentadas por escrito. Por los tiempos del periodo de la LXII Legislatura, solamente se procedió a elaborar el documento para los dos primeros aspectos y así, en el pleno de la sesión del 30 de junio, Aguirre presentó la iniciativa con proyecto de decreto de urgente resolución, puesto que se deseaba aprovechar el 6 de septiembre de 2018, el Cincuentenario como universidad, para hacer el reconocimiento.
Las sesiones posteriores en julio de 2018 se realizaron en una sala pequeña del mismo Congreso, en las que se citaron a los miembros de la comisión, los diputados Iris Aguirre, Isadora Santiváñez y Le Roy Barragán; igualmente se convocó a quien esto suscribe como cronista de la UAZ y promotor de la solicitud.
Los puntos de análisis y alocuciones fueron desde la justificación de los merecimientos de la UAZ hasta los antecedentes de la correspondencia de la Legislatura para hacer la propuesta del decreto. El tiempo avanzaba y la fecha del Cincuentenario se acercaba, así que en las siguientes reuniones presenté documentos como el Decreto 496, donde se denomina universidad a nuestra alma máter y en un párrafo se refiere a ella como “benemérita institución”; también presenté las declaratorias de instituciones como la hoy Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, la Benemérita Universidad de Guadalajara y, de nivel estatal, la Benemérita Escuela Normal Ávila Camacho.
En otras sesiones llevé paquetes de libros con los productos de investigaciones de universitarios como Mariana Terán, Manuel Martínez Delgado, Manuel Ibarra, José Luis Acevedo, Sergio Candelas Villalba y otros; fueron días de intenso trabajo hasta que se justificó plenamente la propuesta.
En la última reunión se leyó la propuesta de documento final aceptado. Desafortunadamente concluyó el periodo de sesiones extraordinarias y no fue posible pasar la propuesta al pleno. Lo demás es historia: se llegó el 6 de septiembre esperado, se realizó el evento conmemorativo del Cincuentenario como UAZ y la LXII legislatura concluyó su ciclo dejando nuestro documento entre los asuntos pendientes.
Ahora que la petición fue retomada y aprobada por la LXIII Legislatura, es momento de regocijarnos, así como es propicio agradecer a todos los que hicieron posible que la UAZ haya sido reconocida como benemérita, entre ellos la actual Comisión de Desarrollo Cultural, integrada por los diputados Roxana Muñoz González, Javier Calzada Vázquez y Pedro Martínez Flores.
Aunque el proceso apenas inicia, pues faltan varios aspectos como hacer la debida modificación de la Ley orgánica y otras formalidades, es deseable que se hiciera una sesión solemne como la que vivimos en el 2007 cuando se colocó en letras doradas el nombre de la Universidad en el recinto legislativo y los diputados evocaron sentidos discursos que hicieron revivir el significado de nuestra alma máter y el orgullo de ser universitarios.
Por tal declaratoria, sería ideal que se realice ese bando solemne propuesto por las calles del Centro de Zacatecas, patrimonio cultural mundial del que la UAZ forma parte; que la estudiantina haga gala de su espíritu de alegría por ser orgullosamente universitarios y que culminemos en ese lugar histórico como lo es el auditorio Magdaleno Varela Luján en el que miembros de la comunidad universitaria expresen su sentir y una explosión de satisfacciones envuelva el universo académico, cultural y de extensión del que formamos parte como astros luminosos, como partículas de un todo que crece y se contagia, y que en la diversidad de nuestros pensamientos nos convirtamos en uno; que renazca el sentimiento de trabajar en unidad para el mejor futuro que empieza hoy…
Somos parte de este capítulo maravilloso de la historia institucional, vivámoslo a plenitud y sigamos caminando, sigamos construyendo.
Con un saludo desde Antigua, ciudad de Guatemala… así se observa el mundo desde El Mirador de Heródoto. ■
*Cronista de la UAZ.
[email protected]
[email protected]
