La Paz. El presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó hoy que las protestas y los cortes de ruta que se registran en el departamento boliviano de Potosí, ubicado a 530 kilómetros al sur de La Paz, alejarán a los turistas y dejarán «perjuicios irreparables» para la región.
Las protestas, lideradas por el Comité Cívico Potosinista (Comcipo), mantienen desde hace 15 días aislada a la ciudad capital del departamento de Potosí, declarada por la Unesco Patrimonio de la Humanidad, por su riqueza arquitectónica colonial y el emblemático Cerro Rico.
Comcipo exige una reunión con Evo Morales para debatir un pliego de demandas en la que se halla la construcción de dos hospitales, una fábrica de cemento y un aeropuerto. El gobierno boliviano asegura que cumplió con 95 por ciento de esas peticiones.
«¿Cuánto están perdiendo y cuánto van a perder? La gente va a tener miedo de volver a Potosí por turismo. He recibido quejas del embajador de Argentina, Alemania y Francia. Felizmente sacamos (a los turistas), pero ya está hecho el daño. A eso digo destrucción», enfatizó Morales en un acto público realizado en la ciudad de Tupiza, próxima a la frontera con Argentina.
El embajador de Argentina en Bolivia, Ariel Basteiro, informó hoy que este fin de semana se evacuó a 68 turistas argentinos que estaban varados en la ciudad de Potosí. Explicó que, por efecto de esta acción, también salieron del lugar del conflicto visitantes europeos, cuyo número no precisó.
El diplomático precisó que se logró la evacuación luego de una negociación con los dirigentes de Comcipo. Aclaró que el operativo fue pacífico y que intervinieron funcionarios de su Cancillería.
