■ Diputados federales desaparecieron Fondo de Apoyo a Migrantes, advierte
El diputado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Felipe Cabral Soto, solicitó a los integrantes de la 62 Legislatura local que se considere en el presupuesto de egresos del estado de 2017 una partida de 20 millones de pesos para atender a los zacatecanos que sean deportados desde los Estados Unidos.
Este planteamiento lo realizó durante los asuntos generales de la sesión ordinaria realizada este jueves en el Congreso del estado.
Sostuvo que es necesario que los legisladores zacatecanos se solidaricen con los paisanos que regresen forzosamente a la entidad, a causa de las políticas que pueda implementar el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump.
Este apoyo es todavía más necesario, precisó, después del “revés” dado por los diputados federales en el Congreso de la Unión al desaparecer del Presupuesto de Egresos de la Federación del próximo año el Fondo de Apoyo a Migrantes, que a nivel nacional este 2016 fue de 300 millones de pesos.
Cabral Soto reconoció que no se sabe aún quiénes ni cuántos zacatecanos serán deportados, pero consideró que lo que es un hecho es que en próximas fechas los diputados locales tendrán la responsabilidad de aprobar el presupuesto de la entidad, por lo que debe tenerse en cuenta esta situación.
Asimismo, hizo su llamado para que se reabran “en forma inmediata” todas las oficinas de representación que el Gobierno del Estado tiene en el territorio estadounidense. Puntualizó que estos espacios se encuentran cerrados desde hace meses y, por lo tanto, no han dado atención a los zacatecanos residentes en el país vecino del norte.
Es indispensable que se abran las puertas de estas oficinas, sostuvo, con la finalidad de que los connacionales que viven al otro lado de la frontera y que pudieran ser afectados por deportaciones al interior de sus familias tengan la posibilidad de ser apoyados.
El legislador del tricolor indicó que las personas que sean deportadas, “evidentemente, regresarán a sus municipios o comunidades de origen, en donde no se cuenta con condiciones favorables para recibirlos”.
Consideró que a estos zacatecanos se les deben dar las condiciones mínimas para que reinicien su vida en el territorio estatal, proporcionándoles acceso a la salud, educación para sus hijos y sobre todo un trabajo digno, con una remuneración que les permita un desarrollo personal y una verdadera integración social.
“Son ellos los que hasta el momento han sostenido gran parte de Zacatecas; aportan remesas a diario para el bienestar de sus familias, beneficiando con ello la economía de la entidad. Ahora, algunos de ellos requieren de nuestra solidaridad ante la inminente deportación que se aproxima”.
Por tanto, concluyó su intervención apelando a la “voluntad humanitaria y política” de sus compañeros legisladores para que se apoye a los zacatecanos que regresen y para que “no les demos la espalda como lo hicieron los diputados federales”.
