Festival Internacional de Cannes, a 50 años del movimiento de 1968

El 21 Festival de Cine de Cannes empezó como estaba previsto el 10 de mayo de 1968. Esa misma noche la policía de París reprimió una manifestación de 20 mil estudiantes de la Sorbona; cientos de estudiantes y policías fueron hospitalizados y varios de los primeros varios encarcelados.
Los estudiantes se manifestaban contra las políticas conservadoras del gobierno de Charles de Gaulle, aún héroe de la liberación de la Francia en la Segunda Guerra mundial. A dos días de la represión, cerca de dos millones de trabajadores franceses salieron a manifestarse contra las medidas del gobierno y declararon una huelga general.
El Festival, mientras tanto, parecía que seguiría su curso hasta el 24 de mayo. La Competición tenía varios nominados, entre otros a Alain Resnais, Jiri Menzel, Carlos Saura y Milos Forman.
Sin embargo, varios directores retiraron sus películas y los jurados –entre ellos Louis Malle y Terence Young- renunciaron como muestra de solidaridad a los estudiantes y a los huelguistas. Para la proyección del 18 de mayo el público asaltó la pantalla para evitar que el filme Peppermint frappe, de Carlos Saura, fuera proyectado.
En ese momento el grupo de cineastas liderado por los franceses Francois Truffaut, Jean-Luc Godard, Claude Berri, Claude Lelouch y Louis Malle insistieron ante el Secretario General del Festival, Robert Favre Le Bret, para que el Festival terminara. Lo consiguieron, de 28 filmes programados sólo se proyectaron 11.
Un mes más tarde, Roman Polansky, quien era el presidente del Jurado del Festival, los trató de idiotas, argumentado que estos personajes –mencionó a Truffaut, Lelouch y Godard- “estaban jugando a ser revolucionarios”.
Este acontecimiento se unió al malestar que el medio cinematográfico resentía contra el Ministro de Cultura, André Malraux, por haber destituido al director de la cineteca francesa Henri Langlois y contra el Centro Nacional de Cinematografía por considerar sus políticas demasiado experimentales y sin apoyo para otro tipo de cine que no fuera el intelectual.
Las manifestaciones y huelgas consiguieron, además de que Langlois regresara a su puesto, a que el CNC se volviera más incluyente, los directores crearon la Quincena de Realizadores para abrir una sección paralela a la Competición del Festival y ofrecer espacios para propuestas distintas a las impuestas por las políticas festivaleras.
A 50 años del movimiento social y de la solidaridad entre los realizadores, el medio se enfrenta no sólo a la diatriba de pensar qué es y cómo se difunde el cine, sino a cómo se vinculan los cineastas de todo el mundo en donde hay muestras de dictaduras represivas, tal es el caso en Rusia.
El año pasado, a manera de referencia, el director de cine Michel Hazanavicius presentó en Competición por la Palma de Oro su película Le redoutable (El temible). Una historia de la movilización y militancia de Jean-Luc Godard durante el movimiento y su posterior vida alejada de la farándula cinematográfica pero igual de activa. Este año, Jean-Luc Godard regresa a la Competición por la Palma de Oro con su película Le livre d’image. A ver qué pasa.