El muchacho fue privado de su libertad por presuntos policías y le quitaron la vida
La familia de la víctima huyó del estado; afirman que fueron amenazados por supuestos agentes
La madre del joven de 18 años que fue privado de su libertad y posteriormente asesinado en Pánfilo Natera tuvo que salir del estado, junto con su familia, tras haber sufrido amenazas de parte de supuestos elementos de la Policía Estatal Preventiva, corporación a la que horas antes había acusado de cometer el crimen en contra de su hijo.
En una entrevista en el programa de la periodista Carmen Aristegui, Inés Colunga narra que al día siguiente de velar a su hijo Iván, es decir, este jueves por la mañana llegó “a la puerta de mi casa” una patrulla de la Policía Estatal.
El vehículo se paró enfrente de la vivienda durante dos minutos y una persona encapuchada que estaba a bordo de la unidad lanzó una amenaza contra la familia del joven asesinado: “Se quedan y vamos a acabar con ustedes; es mejor que se vayan”, recordó Inés.
Por ese motivo, dijo, tuvieron que huir de su comunidad, Unión de San Antonio, y ahora se encuentran escondidos: “Temo por mi familia, temo por mis hijos. (…) Salí del estado. Fue muy duro dejar todo, toda una vida, todo lo que tenemos, mi casa, mis cosas y salir huyendo como si yo fuera una delincuente”.
En este caso, la madre del joven asesinado aseguró que no recuerda el número de patrulla ni tampoco pudo identificar a quienes los amenazaron, pues llevaban la cara cubierta; “no me queda claro nada porque no tienen el valor de destaparse el rostro”.
Sin embargo, la madrugada en la que presuntos policías estatales se llevaron a su hijo sí reconoció a quien dirigía al grupo de personas que forzó la puerta, entró a su casa, la amarró a ella, a su pareja y a otro de sus hijos, y se llevó a Iván. Fue ‘El Colombiano’, apuntó Inés.
Antes de que la ataran y colocaran en el piso, expuso, pudo ver a seis personas, cuatro uniformadas y dos vestidas de civil, pero agregó que “estoy segura que había más porque se escuchaban en los otros cuartos de mis hijos”.
“Está uno dormido, entraron a mi casa, nos amarraron, entraron al cuarto de mis hijos, amarraron al otro y se llevaron a mi hijo. No pude hacer nada por mi hijo y si hubiera podido, no sé qué hubiera hecho pero lo hubiera salvado. Todo lo que hice fue para que me lo regresaran con vida y fue inútil”.
Con la frase “todo lo que hice”, Inés precisó en la entrevista que se refiere a haber alzado la voz para denunciar públicamente que policías estatales habían sido los responsables de la desaparición de su hijo y de su posterior asesinato.
Fue este paso que dio, de difundir en medios de comunicación y redes sociales el caso, la razón a la que atribuye las amenazas que la orillaron a abandonar su hogar, ante la indefensión en la que se encontraban.
“Hasta ahorita nadie de los que creo que pueden protegerme, nadie, se ha dedicado un momento a darme protección. Ni el gobernador ni nadie. Estamos solos, desprotegidos de la gente que según están para ver por nosotros. Nadie ha tratado de hablar conmigo para decirme ‘todo va a estar bien, regresa a tu casa, regresa a tus cosas, vas a estar protegida’. Nadie me ofrece protección”.
El mismo día de la desaparición y asesinato del joven Iván, después de que su madre acusara a elementos policiacos, el gobierno del estado reaccionó enviando un comunicado de prensa en el que se deslindó por completo del hecho.
En el documento se dijo que el secretario de Seguridad Pública Ismael Camberos Hernández “negó categóricamente que elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) estén involucrados en el caso”.
También se expuso que el funcionario “anticipó que existen elementos suficientes para descartar la participación” de agentes de la corporación y luego recordó otro caso de desaparición de un joven en Villa Hidalgo el año pasado, en el que fueron señalados policías estatales y días después fue hallada una patrulla clonada que fue la que participó en esos hechos.
Al día siguiente de lo ocurrido en Pánfilo Natera, se mandó un nuevo boletín en el que se recalcaba que la Secretaría de Seguridad Pública tenía “plena disposición para colaborar en la investigación” de la Fiscalía General de Justicia del Estado, además de que se informaba que Camberos Hernández había instruido a la dirección de Asuntos Internos de la secretaría que abriera su propia indagatoria.
Respecto a la posibilidad planteada por las autoridades de que fuera clonada la patrulla 571 que fue la que identificó la madre de Iván como el vehículo en el que se llevaron a su hijo, Inés Colunga dijo que no es posible porque, entonces, tendrían que haber clonado también a ‘El Colombiano’, a quien identifica como la persona que iba al mando de quienes entraron en su casa de madrugada.
Es “de tez negra, muy moreno. Es muy conocido en la comunidad, todos lo conocemos. Es el que entra haciéndole daño a muchas familias y, si fuera una patrulla clonada, tendría que ser clonado también él”. En la entrevista con Carmen Aristegui, Inés le puso nombre y apellido: John Casara Luna.
En la Policía Estatal Preventiva hay un elemento de nacionalidad colombiana que responde a este nombre. Se trata de quien ha sido presentado públicamente como un instructor de los agentes estatales y, en concreto, del Grupo Aeromóvil Táctico de la PEP (GATPE).
Asimismo, en junio de 2015 protagonizó un accidente al caer del helicóptero durante una exhibición pública, hecho que quedó registrado inclusive en videos que grabaron los asistentes al evento.
Esta persona, según informó la vocería de Gobierno del Estado en materia de seguridad, fue suspendida temporalmente, mientras se llevan a cabo las investigaciones en las que se le señalan directamente por la desaparición y el asesinato del joven Iván.
Además, en la entrevista con Carmen Aristegui también fue responsabilizado por la madre de la víctima de cualquier daño que sufran ella y su familia.
Inés Colunga todavía espera que las autoridades estatales se comuniquen con ella para que la investigación avance. “Yo sé que nada me va a devolver a mi hijo, nada de lo que yo haga o diga, pero esto no puede quedar así; así me ande escondiendo, voy a seguir adelante”.
