Hablar de la cultura; aunque suene simple no lo es tanto. La gente aún se pregunta qué es lo que se define con el termino CULTURA, en principio tendríamos que aceptar que CULTURA implica la totalidad de los usos y costumbres de una población determinada, sus formas de convivencia, sus formas de alimentarse, y sobre todo sus formas de divertirse y de disfrutar tanto en el ámbito de lo privado como de lo público.
Aquí tendríamos que aceptar que todo es cultura, desde nuestra forma de vestirnos sobre todo si tiene que ver con nuestras costumbres ancestrales – como el traje de charro por poner solo un ejemplo – y que se va perdiendo cuando comenzamos a vestirnos a la usanza de nuestros vecinos del norte en los tiempos actuales o como los europeos en otros tiempos.
Cultura es algunos de los platillos que nos son típicos como el asado de boda, el agua de Jamaica, el licor de agave por poner tan solo algunos ejemplos, pero cuando comenzamos a comer otros alimentos y dejamos de lado de alguna forma los nuestros y los cambiamos por las pizzas o las hamburguesas entonces nuestros patrones culturales se van perdiendo.
Y así podríamos seguir con otras costumbres como nuestra música – la tambora jerezana por ejemplo – de frente a otras formas musicales ajenas a nosotros con las que se contaminan nuestros oídos.
Pero aquí alguien me podría contradecir y asegurar que la música proveniente de otros sitios así como los alimentos o las formas de vestir son sin lugar a dudas elementos culturales, tal vez ajenos pero cuando se implantan entre nosotros comienzan a volverse parte de nuestra cultura en particular
Por otro lado tendríamos que saber que existe otra acepción al término de cultura y decir aquella que se refiere al arte y sus valores estéticos, y nos referimos a todas las formas del arte desde la plástica, el cine, el teatro, la música etc.
Y el arte también tiene sus múltiples variantes dependiendo de dónde provenga. Aquí tendríamos que decir con todas sus palabras que existen países con más cultura que otros, el nuestro por ejemplo tiene una cultura que ya quisieran muchos, y no es la cultura traída por los españoles – por aquello de las disculpas y cosas por el estilo – sino la cultura precolombina de aquellos que estaban aquí antes de la llegada de los españoles, antes de la conquista y nos referimos a las más de 60 lenguas que aún existen en diferentes regiones del país, las formas de vestir, las pirámides y las construcciones indígenas, sus murales sus bajorrelieves y tantas cosas más muchas de las cuales fueron destruidas por los españoles en su afán de convertir todo lo que tocaban tomando como pretexto el de una gesta civilizatoria.
Fue seguramente un gesto civilizatorio la destrucción de la mayor parte de los códices mayas por el arzobispo de Yucatán, por el amor de Dios.
Si entendemos – solo por un momento – la cultura como las diversas expresiones del arte y la posibilidad de saber apreciarlo, no me queda ninguna duda de que la sociedad zacatecana es muy culta y esto seguramente gracias a que en la historia reciente sus gobiernos se han preocupado por hacerles llegar las manifestaciones culturales provenientes de diversas partes del mundo.
Una prueba de lo que digo es el de comentar que he tenido la oportunidad de por ejemplo acudir a un concierto de música clásica en el Lincoln Center de Nueva York y ver como la audiencia aun aplaude entre uno y otro movimiento de una sinfonía X mientras que aquí en nuestro Teatro Calderón el público presente se abstiene – como debe ser – de hacerlo
Ahora bien como intentar incrementar esos valores culturales tan arraigados entre las y los zacatecanos, armando festivales, claro pero cuidado.
LA CANTIDAD DE FESTIVALES NO LES DA LA CALIDAD A LOS MISMOS
Es decir nuestro estado – principalmente la ciudad capital – cuenta con muchos festivales – tal vez demasiados – pero en ellos la calidad baja año con año aunque la cantidad se incremente.
Y QUE QUEDE CLARO el 99%de la asistencia es de personas locales y los turistas casi siempre nacionales que acuden a esta ciudad lo hacen porque existe la percepción – como recientemente se informó – que es la ciudad colonial de mayor belleza y con la mejor catedral del país, pero eso no se ganó con las acciones – ni mucho menos – del Secretario de Turismo el Sr Yarto – del que estamos hartos – para que nadie intente colgarse medallas que no les corresponden, y los turistas que vienen si se topan con alguna actividad como seria la semana cultural la aprovechan, pero QUE QUEDE CLARO – INSISTO – no vienen con el objetivo de asistir a ninguno de los festivales – que por su falta de importancia y claro de presupuesto día a día merman su valor y su atractivo –
La pregunta sería si es que se podría hacer algo mejor y la respuesta tiene que ser contundente ¡CLARO QUE SI! con algo de imaginación, con pensamientos innovadores y con mucha gestión.
Pongo solo un ejemplo LA DIRECTIVA SALIENTE DEL TEATRO CALDERON MERCE UN FUERTE APLAUSO, porque alguien – no sé quién pero merece todo nuestro reconocimiento – se le ocurrió realizar la gestión para traer al menos 4 conjuntos de los 14 que participaron el en Festival conocido como EUROJAZZ donde conjuntos de diferentes partes de Europa acuden al CENTRO NACIONAL DE LAS ARTES a presentar su música los fines de semana del mes de marzo. Pues bien alguien realizo la gestión y logro traerlos, y había comunicado que el costo de entrada sería de 80 pesos – que estoy seguro hubieran sido pagados sin problema, la prueba es los llenos del festival de jazz local donde la gente paga por entrar 150 pesos y consume y disfruta la música.
CON LA DIFERENCIA QUE LOS CONJUNTOS QUE TRAEN PARA EL FESTIVAL DE JAZZ casi siempre de origen caribeño no pueden compararse con la calidad de los conjuntos europeos que son negociados a través de las embajadas de aquellos países en México. ν
Gestión, gestión es la clave.
Esta historia continuará.
