■ Hay 74 plantas potabilizadoras; se construyen según las características de la zona
■ En el estado la calidad del vital líquido “en su mayoría es buena”: Alma Fabiola Rivera
Los minerales y el flúor son los contaminantes que se presentan con mayor frecuencia en los cuerpos de agua de la entidad, principalmente en los subterráneos, desde los cuales se extrae el recurso para consumo humano.
La titular de la Secretaría de Agua y Medio Ambiente (SAMA), Alma Fabiola Rivera Salinas, consideró que “en su mayoría es buena” la calidad del vital líquido en el estado. No obstante, se tiene detectada sobre todo la existencia de minerales y de flúor, esta última sustancia principalmente se encuentra en la zona de los Cañones.
Comentó que “para tener una efectiva calidad” del agua se tienen en el estado 74 plantas potabilizadoras. En cada caso, expuso, están construidas teniendo en cuenta las especificidades de la zona en la que operan, puesto que no se tienen los mismos contaminantes en todas las regiones.
En este sentido comentó que la presencia de minerales se da más en el norte, mientras que el flúor es más recurrente en la región de los Cañones.
Por eso, “las plantas de tratamiento tienen membranas que nos ayudan a tratar el diferente contaminante que se presenta, no son iguales, son diseñadas para cada una de las localidades con su respectiva cantidad de contaminantes y caudal”.
Aparte de estas sustancias, la secretaria comentó que también “tenemos presencia de sales y las sales no van mucho con la planta potabilizadora y por eso tenemos en las tuberías obstrucciones”; pero concluyó que “eso no te daña que se pueda estar utilizando” este recurso.
Debido a que para establecer una planta potabilizadora debe hacerse primero un estudio sobre la calidad del agua y el caudal que tiene un pozo determinado, Rivera Salinas señaló que este proceso debe realizarse en estrecha coordinación con la Comisión Nacional del Agua (Conagua). En las revisiones, agregó, también participan las autoridades del Sector Salud.
Cabe recordar que este mismo viernes, en la conmemoración del Día Mundial del Agua, el vicepresidente de la Asociación Mexicana de Hidráulica, Marco Murillo Ruiz, recalcó que el verdadero problema en torno al vital líquido es el de la calidad y no el de la cantidad.
En ese tenor, denunció que en México no existe autoridad alguna o instancia autónoma que vigile las condiciones del agua que se suministra para el consumo humano, pues de los 46 parámetros que se establecen en la Norma 127, sólo se revisa uno y que es el que tiene que ver con la desinfección mediante los sistemas de cloración.
