■ Inició en la calle del Ángel y culminó en las escalinatas del cerro de La Bufa
Este viernes se llevó a cabo el tradicional Viacrucis en el Centro Histórico y que concluye en el cerro de La Bufa. En esta representación se involucran vecinos de la zona centro y es una de las más vistas por los turistas
Centenares de fieles, revivieron como cada año, el tradicional viacrucis viviente en el que se recuerda la pasión, crucifixión y muerte de Jesucristo durante este Viernes Santo. Decenas de creyentes, en medio de una solemnidad, fue recreada esta escena en la que se cuenta de acuerdo con la tradición católica, cómo el hijo de dios cambió su vida porque se perdonaran los pecados de la humanidad.
La escenificación recreada por los feligreses, inició en la calle del Ángel, en la zona centro, culminando en las escalinatas del cerro de La Bufa. De esta manera los zacatecanos y visitantes pudieron revivir la muerte de Cristo, ocurrida hace más de 2 mil años.
El calvario de Jesús de Nazaret con la cruz a cuestas, comenzó antes de las 10 de la mañana. Con la primera escena, donde se lleva a cabo el juicio ante Poncio Pilatos, quien ordenó su crucifixión y muerte en la cruz.
Es de esta forma en que el pueblo recordó el sufrimiento que padeció Jesús por los pecadores, interpretado por los actores, que eran observados por niños, jóvenes y adultos muy sorprendidos ante la representación de la brutalidad con la que fue golpeado el Hijo de Dios, hubo incluso lágrimas entre los asistentes.
Es sin duda el momento cúspide de la Crucifixión el espacio de mayor atracción de este viacrucis, todos reflexionan sobre lo que tuvo que padecer Jesucristo cuando fue condenado por los hombres.
Los espectadores, conmovidos, se comprometen en silencio a acercarse más a Dios, dijo Marisela una de las tantas espectadoras de este viacrucis, que busca ante todo la Fe y la devoción y que genera una gran afluencia de asistentes, sin dejar de lado la participación de los actores todos voluntarios por cada día hacer más emotivo y atractivo este viacrucis.
