“Ni Chana, ni Juana”
UNO: No les ofende nada.
DOS:
Cuestionamientos a discurso presidencial.
TRES: Fresnillo, bomba de tiempo.
UNO: “Al tuerto y al cojo ábrales el ojo”
En pleno escándalo, en plena crisis de representatividad de las instituciones y cuando sólo dos de cada 10 mexicanos creen en los partidos políticos, la partidocracia expresada en la Legislatura le dijo NO a regular las sumas ofensivas que reciben los funcionarios públicos como sueldo por su eficiente trabajo.
El autismo en su máxima expresión.
DOS: “Obras son amores y no buenas palabras”
En su función de vocero, el secretario de la organización no gubernamental México Unido contra la Delincuencia, Francisco Torres, declaró que es necesario ver resultados positivos y no discursos atractivos.
En referencia, claro, al decálogo leído por Enrique Peña Nieto.
Torres calificó a las propuestas presidenciales como “un catálogo de buenas intenciones”.
Pidió también que “el foco sean los resultados, no las acciones”.
“Si quieren hacer una lucha frontal a la corrupción y a la impunidad, que pongan su casa en orden”, agregó.
Ni un sólo funcionario despedido, ni una renuncia por dignidad.
Nada.
TRES: “Alabanza propia, mentira clara”
Un jueves sangriento tuvo ahora Fresnillo, como no se vivía desde 2009.
Mala señal.
Jesús Pinto, responsable de la seguridad pública del estado, debería estar más que preocupado y ocupado ante la compleja problemática de este municipio tan especial.
Independientemente de si son o no delincuentes las autoridades deben de esclarecer los asesinatos.
COLOFÓN: Pese al decálogo oficial nos siguen faltando los 43 normalistas, los 11 presos políticos, los 30 de Cocula, los más de 22 mil desaparecidos y esclarecer las miles de muertes derivadas de una estrategia fallida.
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