■ La Federación aportaría 170 mdp a cambio de ajustar cláusulas de pensiones y jubilaciones
■ Debía constituir el Fideicomiso de Jubilaciones para el sector académico por 50 mdp
Un convenio firmado por la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), la entonces llamada Secretaría de Educación y Cultura (SEC) y la Secretaría de Educación Pública (SEP), con fecha 31 de octubre de 2007, evidencia la intención de Gobierno Federal de modificar los Contratos Colectivos de la Máxima Casa de Estudios de la entidad, y de la Rectoría en turno de aceptarlo a cambio de la asignación de recursos que le permitan sanear su déficit financiero.
En el actual contexto en el que la Universidad tiene un adeudo estructural de alrededor de mil millones de pesos, la Dirección General de Educación General Universitaria de la SEP (Dgesu) sugirió a la UAZ modificar algunos aspectos contractuales, principalmente los que se refieren a los esquemas de jubilación y pensión, de manera similar a lo que plantea el convenio de 2007.
El documento firmado por el entonces rector Alfredo Femat Bañuelos, establece que, mientras la Federación aportaría 170 millones a la Universidad por concepto de “recursos públicos extraordinarios no regularizables”, la Universidad debía “modificar los Contratos Colectivos de Trabajo para ajustar las cláusulas de pensiones y jubilaciones”.
También obligaba a la UAZ a “presentar información detallada para identificar académicos con perfil deseable, liquidar académicos que no cumplan con el perfil y justificar la contratación de personal administrativo”, y “modificar el Contrato Colectivo de Trabajo para ajustar las prestaciones al Modelo de Educación Superior”.
Otros encisos refieren que la Máxima Casa de Estudios debía “constituir el Fideicomiso de Jubilaciones para el sector académico por 50 millones de pesos, depositados en una institución bancaria”.
Asimismo, “constituir un Fideicomiso de Jubilaciones y Pensiones para el sector administrativo con 6 millones de pesos, con aportaciones de 3 millones de pesos de Rectoría y una cantidad similar por el sindicato” y “presentar una propuesta integral de solución definitiva para resolver los pasivos laborales y evitar el desfinanciamiento”.
Alberto Vélez Rodríguez, profesor de la Unidad Académica de Ingeniería, señaló que el documento evidencia que desde hace mucho tiempo el Gobierno Federal tiene la intención de modificar los Contratos Colectivos de Trabajo y en este caso, aunque el rector en turno se comprometió a hacerlo y recibió recursos para ello, nunca hubo cumplimento del convenio.
“Aquí la pregunta es: ¿Qué le hizo a la lana? ¿Qué estará pensando ahora el Gobierno Federal? ¿Por qué no exige el cumplimiento de esos compromisos?”, cuestionó el ex aspirante a la dirigencia del Spauaz.
Incluso, recordó que en ese momento la dirigencia del Spauaz planteaba la instauración del modelo SEP en lugar del modelo UAZ, mediante un nuevo esquema de Contrato Colectivo de Trabajo.
Comentó que en ese momento Femat Bañuelos había anunciado la conformación de un fideicomiso para depositar 50 millones de pesos y tener la capacidad de pagar a los jubilados, pero a la fecha se desconoce si existe.
“Aquí la preocupación, más que ese convenio firmado y no cumplido, es que seguramente Gobierno Federal insiste en este momento en que los Contratos Colectivos de Trabajo se cambien, según se plasmó en el oficio que recientemente se dio a conocer. El detalle es saber qué estará pidiendo y por qué las autoridades siguen guardando silencio y los líderes sindicales tampoco se pronuncian claramente”.
De acuerdo con Vélez Rodríguez, el riesgo es que en este momento haya un convenio similar, y que ahora sí Gobierno Federal obligue a su cumplimiento, tanto al rector como a los sindicatos.
Además, dijo que prevalece la duda sobre lo ocurrido con los 170 millones de pesos otorgados, porque debían ser usados para la creación de un fideicomiso y para pagar liquidaciones de docentes, ya que ni se liquidó a maestros ni se conoce el destino de ese recurso.
“Si lo vemos como grupo político gobernante al interior de la UAZ, desde entonces es el mismo, dominan la Rectoría y el sindicato. Entonces la estrategia que han tenido es que no piden revisión de contrato, sino revisión contractual, tratando de resguardarse”, explicó.
Por su parte, Antonio Guzmán Fernández, ex secretario general del Spauaz, recordó que en 2005, cuando se condonó el adeudo con el ISSSTE, hubo consecuencias en los Contratos Colectivos de Trabajo, y en ese momento se recorrió el periodo laboral de jubilación, de 25 a 30 años, además de aumentar a 8 por ciento la aportación de los profesores a ese instituto.
Es decir, en un contexto de fragilidad financiera, “siempre van a estar tentados a modificar prestaciones del Contrato Colectivo de Trabajo. Hoy vemos que los modelos de pensiones son el ente más atacado en el país, pues se trata de algo que estaba enmarcado en el Estado de Bienestar”.
En el caso de la UAZ, refirió que en el Contrato Colectivo hay tres esquemas de jubilación: vía Contrato Colectivo, Décimo Transitorio y Cuentas Individuales, estas últimas sin capacidad de proteger al trabajador porque no se les realiza depósito alguno.
La postura que ha adoptado el Spauaz respecto a esa tentativa de modificar el Contrato Colectivo, entonces, ha sido la adecuada durante los últimos 10 años, y el mecanismo legal implementado para su defensa es evitar su revisión.
“Eso nos ha ayudado mucho porque a final de cuentas la relación laboral está pactada bilateralmente en el contrato y podemos checar que no ha habido modificación alguna a las cláusulas de la jubilación. De parte de la administración siempre habrá la tentación de ofrecer algo para salir al quite en el problema financiero que se tiene”, señaló Guzmán Fernández.
Independientemente del convenio firmado en 2007 y su incumplimiento, manifestó que los universitarios deben poner énfasis en la forma como se ha llegado a la situación actual, al grado que no hay capacidad de atender un adeudo de alrededor de mil millones de pesos.
Desde el punto de vista sindical, reiteró que la postura de no revisar y blindar el Contrato Colectivo de Trabajo ha ayudado y por lo tanto se mantiene la jubilación de acuerdo a como se ha establecido.
Aunque la modificación del contrato y las prestaciones es una pretensión importante de Gobierno Federal, lo más importante es erradicar la contracción colectiva, lo cual ya se está llevando a cabo en Pemex con la instauración de un esquema de contratación individual de los trabajadores.
Sobre el convenio firmado en 2007, Guzmán Fernández destacó que a final de cuentas no se modificaron los esquemas de jubilación, pero además hay aspectos como la conformación de un fideicomiso, el cual tampoco se ha logrado.
“El llamado es a poner más atención. Es importante estar alerta sobre lo que se está negociando con la SEP en México y que no ponga en riesgo las prestaciones que están establecidas en el contrato”, advirtió.
Incluso, recordó que en la carta emitida por la Dirección General de Educación Superior a la UAZ, hay aspectos que muestran una posible negociación, motivo por el cual es necesario vigilar las acciones de la Rectoría.
Lo preocupante desde su perspectiva es que, después del rescate de la UAZ hace algunos años, persiste la opacidad en el uso de los recursos, otorgamiento de salarios privilegiados a los funcionarios y nuevamente se ha dejado de pagar la Seguridad Social.
