Aunque las estructuras territoriales de Morena en la capital se encuentran prácticamente vaciadas, persiste el ánimo del triunfo inminente por el hecho de mantener los positivos de la marca electoral. Agenda Política pudo conocer el Reporte de Coordinadores Operativos Territoriales (COTs) del partido guinda, y la situación apunta a una operación de holograma.
En el “equipo” de David Monreal Ávila están convencidos que cerca 300 promotores territoriales en todo el estado podrán cubrir las mil 789 secciones electorales en las que se conforma Zacatecas. Esos 300 se desprenden de la misma lista de Servidores de la Nación que mangonea Verónica del Carmen Díaz Robles, con muy pocos conocimientos de operación electoral.
Y sólo obedecen a la delegada de programas sociales, por lo que no responderán más que a las decisiones que tome una funcionaria sin experiencia en trabajo en urnas. Además, se han dedicado a esparcir apoyos sociales en forma de condicionamiento, como si ello les diera garantía de recibir de vuelta los mismos votos que tienen empadronados.
En todos los partidos políticos saben que el voto duro no siempre responde a los estímulos e incentivos económicos, sino que dependen de una estrategia de convencimiento. Condicionar, evidentemente, no es lo mismo que persuadir. Y el Reporte de Convencidos 2021 que produjo Morena en Zacatecas, contiene datos que son oro molido para sus rivales.
Al inicio de año, los COTs que salen a promover el voto de David Monreal se habían planteado una meta de 111 mil 96 “convencidos”, como les llaman. Hacia mediados del mes de marzo, se estancaba en el penoso número de 10 mil 286 ciudadanos a los que habían llegado a reconocer, sin necesidad de haber generado un vínculo para asegurar su sufragio.
Eso en el Distrito 3 federal. Para el caso del Distrito 1, la meta son 9 mil 751 “convencidos” de los cuales apenas visitaron 9 mil 571 de estos. Ni siquiera el 10% total en ambos casos. Si tomamos en cuenta que los primeros ciudadanos “convencidos” son los que ya estaban registrados en sus padrones de programas sociales, en 85 días su meta no se cumplirá ni en una tercera parte.
Además, otra lista distinta de Coordinadores Operativos Territoriales (COTs), está en manos del todavía dirigente estatal de Morena, Fernando Arteaga Gaytán. Son promotores del ala “histórica” que de ninguna manera realizarán activismo en favor de los Monreal. Sus miembros se dedicarán a mermar la escasísima estructura que activó recientemente Verónica Díaz.
Tan sólo los distritos locales 1 y 2 en Zacatecas, conjuntan 71 secciones electorales. Para ellos, David puso en tierra a 26 ex servidores de la nación, que no tienen una idea clara de cómo convertir los apoyos en votos. Cada sección electoral conjunta a un mínimo de 50 ciudadanos (en comunidades rurales) y un máximo de mil 500 (en centros urbanos).
La estrategia de su candidato Jorge Miranda Castro por ahora sólo es de percepción. En tierra apenas ha realizado cuatro reuniones de menos de 30 asistentes (por protocolo sanitario) en las colonias Tres Cruces, Jaralillo, Centro y Bracho. El resto lo conforman pequeños encuentros con núcleos reducidos de ciudadanos, con un gasto promedio de 500 pesos por reunión.
Pasteles, frituras, refrescos, despensas, y otras dádivas que amenizan y se reparten en los convivios reducidos. Resultado: más gasto en convites de menos gente, más fotografías, mayor percepción… y pocos votos en la bolsa. El colmo: las cuatro reuniones de una treintena de asistentes las promovieron mujeres que lo mismo reciben al PAN, PRI y cualquier otro partido.
El exceso de confianza por llevar el nombre de Jorge Miranda Castro en la coalición Juntos Haremos Historia impera en la estrategia. Y es el mismo ánimo que exudan en el D21 para poner en marcha a su mínima maquinaria electoral. No conformes, el del Verde Ecologista deberá cargar todos los negativos que un poco tiempo juntó la planilla monrealista con la que lo obligan a competir.
Pese a que lo negó públicamente el aspirante, en el equipo de “los Mirandas” hubo inconformidad por una planilla que lo único que aporta a la elección es un buen cúmulo de negativos. Ni siquiera su secretario particular Rafael A. Romero fue tomado en cuenta para ocupar un asiento en el cabildo, como era su pretensión.
Dato curioso: aunque “Rafa” Romero y Paulina Hernández Bustos tenían la encomienda de cuidar y aceitar los votos priistas en la capital, no arrancaron adeptos para su proyecto. La mayor parte de los apoyos viene de la SEFIN, donde se opera cotidianamente con la bandera del gobierno de Alejandro Tello Cristerna. Aunque el mandatario no meta las manos, otros sí las meten por él.
La planilla es el talón de Aquiles de Jorge y la ventaja de sus opositores. Es conocido en la opinión pública gracias a su empeño como Secretario de Finanzas, y el oleaje electoral de Morena (de menor intensidad en 2021), se cree que es suficiente para el triunfo. No obstante, la elección tiende a terciarse con la participación de la mancuerna Ulises Mejía Haro e Iván de Santiago Beltrán. ■
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