■ Necesario, un alto a toda medida de represión; no se debe criminalizar la protesta social: director
■ Ramiro Torres exige que el crimen se investigue para que haya justicia verdadera
Con una manifestación cultural pública, realizada a las 18 horas de ayer, la comunidad escolar de la Benemérita Normal Manuel Ávila Camacho (ENMAC) repudió la violencia de que fueron víctima los 57 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, en Ayotzinapa, localidad de Iguala, en el estado de Guerrero, y que tiene en calidad de desaparecidos a 43 de los jóvenes.
Ramiro Torres Bañuelos, director de la institución, citó en breve entrevista para La Jornada Zacatecas realizada con posterioridad a la manifestación: “nuestro lema es: la voz de la patria es el maestro, y si no lo hacemos escuchar en estos casos no tendría sentido”.
Agregó, el evento en que se ofrecieron poesías, intervenciones musicales y lecturas, todas relacionadas con temas de justicia social y nacionalismo, otras reinterpretaciones de la música popular adaptadas para esta tragedia, es un acto de congruencia con los principios de ENMAC, entre ellos, destacadamente la solidaridad.
“Hoy fueron ellos, quizás mañana pudiéramos ser nosotros. Si no nos manifestamos y no repudiamos estos actos que son violatorios de los derechos humanos de nuestros jóvenes, yo no sé cuál sería nuestro papel”, sostuvo.
Durante el acto, dio lectura a una carta abierta que desde ayer inició su circulación como expresión de la postura de la ENMAC con respecto de este atentado, que tuvo como artífices a fuerzas policiacas municipales de Iguala, en la que expresó a nombre de la administrativos, docentes y estudiantes, la profunda consternación por la desaparición de los normalistas, acto que dijo, es “uno de los hechos más lamentables contra la juventud estudiosa de nuestro país”.
Instó a que el crimen se investigue para que se haga justicia verdadera y envío un mensaje de solidaridad a los familiares de los estudiantes que citó, se encontraban matriculados en primer y segundo año de la licenciatura, por lo que su rango de edad oscilaba entre los 18 y 19 años.
Torres Bañuelos pidió se haga un alto a toda medida de represión y se posicionó por la no criminalización de la protesta social.
Participaron en el evento los alumnos Alejandro Moreno Huerta, Eduardo Octavio Ramos Moreno, Nancy Guerrero y los docentes, Sergio Reyes Esparza y Laura Elena Flores, así como la Rondalla Juvenil Amanecer, constituida por alumnos del Taller Juvenil de Música de la ENMAC.
El acto simbólico con que cerró esta manifestación realizada en la escalinata de acceso a la Escuela Normal Manuel Ávila Camacho, fue, luego de nombrar a todos y cada uno de las 57 víctimas, en voz de estudiantes zacatecanos, encender una veladora en su memoria y ofrecer un minuto de silencio, después se soltaron globos blancos al aire al momento en que una niña abría las manos para dejar volar una paloma blanca.
