La reforma educativa avanza a trompicones. La Auditoria Superior de la Federación, en su balance relativo al 2014 encontró inconsistencias entre el gasto y los propósitos que se propuso. Ni gastó bien ni puso atención en los resultados de las evaluaciones aplicadas ese año para mejorar con programas de capacitación y educación continua de los maestros. El mismo INEE sale raspado por el organismo auditor al no elaborar los instrumentos e instrumentar los mecanismos, así como fijar los criterios para superar las deficiencias encontradas.
Sin que suene catastrófico, pudiera ser que por la prolongada crisis que viene arrastrando, nuestra educación pareciera un enfermo. Los resultados del primer ejercicio de evaluación realizado a los maestros en servicio en noviembre nos muestran la aproximación a una radiografía. Una primera lectura nos dice que la mitad de los evaluados se reparte con calificaciones de reprobados y aquellos que pasaron de panzazo. Falta por revisar acogiéndonos al beneficio de la duda, saber si los reactivos del examen se apegan a los contenidos de los programas y si se les preguntó lo indicado que deben saber o bien, fue un examen con dedicatoria para evidenciarlos, como con dedicatoria pudieron ser las notificaciones para evaluarse.
Fueron 3 mil 360 profesores de base adscritos en 28 estados, es decir todos exceptuando a cuatro con importante presencia de la CNTE, quienes no se presentaron a la evaluación, mismos que serán cesados
De acuerdo con la nota de Laura Poy Solano del periódico La Jornada, del martes 1º de marzo, pudimos conocer las cifras sobre los resultados de este primer ejercicio de evaluación. Se citó a 150 mil 86 mentores y directivos, de los cuales sólo acudió el 89.3 por ciento, es decir, 134 mil 140.
Del universo total de evaluados participaron 103 mil 313 docentes de educación básica. En este nivel los rangos de calificación se ubican el 51.6 por ciento en los niveles insuficiente y suficiente, aquí están los que reprobaron y pasaron de panzazo; 27 mil 682 maestros corresponden a bachillerato, entre los que 50 por ciento alcanzó los citados niveles de desempeño. Además, de los 3 mil 145 directores de educación básica examinados, el 58.4 por ciento obtuvo resultados insuficientes y suficientes. También los directores salieron tronados.
Entre los peor calificados, el 15.3 por ciento se ubicaron en el nivel insuficiente (20 mil 479) y 36.2 por ciento en el suficiente (48 mil 588), es decir, poco más de la mitad del total de los que fueron evaluados de acuerdo con las pruebas autorizadas por el INEE, tienen deficiencias en su práctica de enseñanza y conocimientos insuficientes y elementales para atender situaciones educativas.
Aurelio Nuño erigido en el vocero oficioso del SEP y que por cierto aparece muy por abajo en las encuestas hacía el 2018, informó que 40.5 por ciento de los sustentantes alcanzaron un nivel bueno (54 mil 314) y sólo 8 por ciento (10 mil 764) lograron acceder a los niveles más altos de desempeño con resultados destacados o excelentes. Entre estos estarán los premiados con incrementos en sus emolumentos y otros estímulos.
El 51.5 por ciento (69 mil 54) de los evaluados serán sometidos a los procesos de capacitación y formación continua para que mejoren sus conocimientos y práctica docente. Los del nivel insuficiente (el más bajo) no perderán su empleo, estarán condenados a someterse a un nuevo proceso de evaluación en el transcurso de un año. Mejor consuelo tendrán los de calificación suficiente al mantener asegurada su permanencia en la plaza que seguirán teniendo prestada, como prestada se tiene la vida, por cuatro años, cuando cumplido ese plazo deberán evaluarse nuevamente.
En el caso de los bien portados y premiados que obtuvieron un desempeño bueno, podrán promoverse y solicitar más horas de enseñanza, y todavía más, aquellos que lograron resultados de destacado y excelente serán merecedores a un incremento salarial de 35 por ciento en básica y de 24 por ciento en bachillerato. De igual forma disfrutarán préstamos para vivienda y personales preferenciales del Issste. Este selecto grupo no pasa de 12 mil mentores.
El Título Quinto sobre los derechos, obligaciones y sanciones de la LSPD es muy claro en sus artículo 74 que menciona que el “incumplimiento de las obligaciones… dará lugar a la terminación de los efectos del nombramiento”; el Octavo transitorio por su parte, reza: “El personal que no se sujete a los procesos de evaluación…será separado del servicio público sin responsabilidad para la Autoridad Educativa o el Organismo descentralizado…”.
Tras dar a conocer los resultados generales de la evaluación, la autoridad está aplicando la dura LSPD. Sin embargo, por lo pronto hace una excepción con los inconformes disidentes del México profundo, ¿entraran aquí los profesores zacatecanos que optaron por no ser evaluados y pende sobre sus cabezas la espada de Damocles? De los 15 mil 946 que no se presentaron, 12 mil 586 son docentes de Oaxaca, Chiapas, Michoacán y Guerrero, a estos se les aplicará el examen en una fecha en una fecha de reposición durante el primer semestre del año, por lo que no se aplicará con ellos por lo pronto el artículo 74 de la LSPD. A los que si se aplicara la ley a rajatabla es a los el 3 mil 360 maestros de 28 estados donde la SEP puso punto final a los procesos de evaluación, quienes tienen entre seis y 20 años de servicio docente.
Ramiro Álvarez Retana, coordinador del Servicio Profesional Docente, informó que todos los maestros cesados ya han sido notificados. A los de la CNTE que conforman contingentes organizados para resistir y que seguirán resistiendo, se les dará una segunda oportunidad. Si no se ablandan y no acuden en un alto porcentaje probablemente se les sostendrá dependiendo de la fuerza y presión que logren demostrar, pero si son pocos los reincidentes en no evaluarse, sin duda serán despedidos. El desenlace en los estados del Sur dependerá de la fuerza organizada y resistencia que demuestren y aquí la ley puede seguir en suspenso y podría respetarse el viejo derecho de la legislación anterior a la RE de no perder la plaza y garantizar el derecho a un empleo.
Con la divulgación de los resultados de la evaluación restando los de los disidentes de la CNTE que están pendientes, ha concluido el primer ensayo evaluatorio aplicado a los maestros de base en servicio. Ha sido un cáliz amargo para aquellos que no cumplieron ni siquiera con uno de los tres instrumentos obligatorios. El hacha afilada de nuño junto a las tijeras aguzadas de Videgaray se aprestan a hacer rodar las cabezas de los cesados y recortar o suprimir sus plazas docentes. Es la hora de actuar del sindicato para defender el derecho al trabajo de sus representados y dejar de ser aliado y cómplice del gobierno. Quienes no se valuaron lo hicieron quizá conscientes de lo que sucedería. Apostaron a la resistencia organizada y decidida de sus compañeros de gremio. En los hechos mostraron su desacuerdo o renunciaron a la obligación de evaluarse. ■
