- El diálogo entre gobierno y magisterio se requiere para lograr acuerdos y evitar la violencia, dice
- Maestros deberían también comunicar sus propuestas a reforma y tal vez así habría mayor respaldo social
Juan Carlos Andrade Guevara, jefe de Proyectos de Desarrollo Profesional en la asociación civil Innovación en la Enseñanza de la Ciencia, opinó que la Reforma Educativa debe reajustarse y no imponerse al magisterio, porque de lo contrario habrá el riesgo de caer en la violencia.
“Parte de lo que se tiene qué hacer es conversar, dialogar. Creo que estos diálogos que ha habido últimamente con el magisterio es muy positivo porque el gobierno está para dialogar y tampoco puede esperarse que una política pública se implemente al 100 por ciento”, expresó.
En una sociedad democrática, dijo que el diálogo es fundamental, por lo que es necesario que haya acuerdos y que la Reforma Educativa se reajuste, lo que dependerá de la calidad del diálogo entre el gobierno y los maestros.
Durante su visita a Zacatecas para participar en el Coloquio Internacional de Educación que se llevó a cabo en días pasados, manifestó la necesidad que ese diálogo sea abierto a la sociedad en su conjunto, a fin de evitar la violencia, pues a ningún sector le favorece hechos como el ocurrido en Nochixtlán, Oaxaca.
Andrade Guevara consideró que era necesaria una reforma en el sistema educativo debido a la preponderancia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y los vicios que se generaron durante mucho tiempo.
En ese sentido, era lógico que la reforma provocara cierta inestabilidad entre los maestros, sobre todo porque la naturaleza del magisterio es rebelde y “es en dónde se gestan las ideas y no podemos esperar docilidad de parte de los docentes”.
Por otra parte, señaló que en este momento la sociedad quiere conocer las propuestas y los planteamientos del magisterio disidente, pero el problema es que ese aspecto se ausenta del diálogo y en consecuencia se genera desinformación o una visión muy parcial sobre el conflicto.
“Si ellos también comunican qué es lo que proponen a cambio, qué es lo que les gustaría que en la reforma se integrara, se quitara o se modificara, quizá socialmente habría mayor respaldo y desde la opinión pública habría también un mejor entendimiento”, añadió Andrade Guevara.
No obstante, coincidió en que no se puede imponer nada y eso es algo que ha quedado de manifiesto en la opinión pública, por lo que el diálogo entre Gobierno Federal y la CNTE es crucial para llegar a algún acuerdo para mejorar la educación, o de lo contrario el país seguirá condenado al subdesarrollo.
