■ Afirman que las ventas están apenas al 8%; esperan que mejoren
■ Se instalaron en el estacionamiento del boliche El Centauro Issstezac
El ya tradicional mercado del Día de Muertos” es otro caso de las afectaciones producidas por la pandemia por el Coronavirus (Covid-19), esto a pesar de las medidas sanitarias empleadas para que se llevara a cabo.
De acuerdo con comerciantes del lugar, a diferencia de otros años los locales que se ponen son apenas un 5 por ciento de los que se tiene regularmente y las ventas están al 8 por ciento, es decir, que apenas están logrando vender sus productos; la situación es tal que el sector teme no recuperarse “ni para pagar los espacios” del tianguis o tener un ingreso que deje “cualquier nada”.
No obstante, los comerciantes se mostraron optimistas y mencionaron que esperan que durante el fin de semana mejore la situación y haya un alza en las ventas, “que esté más fluido”. Sólo piden una cosa a los asistentes “que debido a la contingencia nos acompañen con las debidas precauciones”.
En este sentido, las autoridades hicieron su parte y cambiaron la locación habitual -frente a los panteones de Herrera y la Purísima- a un espacio más amplio donde se pudieran acatar las normas sanitarias -en el estacionamiento del boliche El Centauro Issstezac-.
José Vargas, encargado de un puesto, detalló que debido al desconocimiento de la situación y cómo se desenvolverá el tianguis, vendedores de productos no perecederos no surtieron mercancía, sino que es del año pasado, sólo “lo suficiente y lo necesario” para vender.
Además, en la entrada hay un filtro sanitario donde se reparte gel antibacterial, se revisa la temperatura de quienes ingresan al mercado; del mismo modo, se indicó a los comerciantes que debían portar el cubrebocas a toda hora y cada puesto debe contar con un dispensador de gel antibacterial. Con la capacidad del espacio también se indicó que haya distancia con la clientela y entre los puestos entre 1.5 y 2 metros.
Para concluir, comerciantes hicieron una invitación a la población a que se sigan las tradiciones, “aunque no salgan de casa” y que atiendan al tianguis, con las medidas de seguridad necesarias, para lograrlo.
