■ Iniciativas para el matrimonio igualitario e identidad de género “han quedado olvidadas”
■ Combatir la discriminación sigue siendo una de las asignaturas pendientes en la sociedad
Las diputadas Mónica Borrego Estrada y Alma Dávila Luévano, ambas de la fracción parlamentaria de Morena en la 63 Legislatura, criticaron la doble moral, el conservadurismo y la hipocresía para no legislar en favor la comunidad LGBTQ+, ya que no aprobaron las iniciativas para el matrimonio igualitario y la que corresponde a la identidad de género “ha quedado olvidada” sin ser dictaminada, siquiera.
El reproche se dio en la sesión ordinaria de este martes en el tema de asuntos generales, cuando Borrego Estrada subió a la máxima tribuna para recordar el Día Internacional contra la homofobia, transfobia y bifobia que se conmemora cada 17 de mayo, una fecha emblemática, dijo, para abogar por la consolidación de una sociedad igualitaria en la que se eliminen, además, las prácticas discriminatorias.
La discriminación, señaló la diputada, sigue siendo en la República mexicana una manifestación cultural negativa que obstruye el desarrollo social con equidad e igualdad, por lo que combatirla, reducirla y eliminarla sigue siendo una de las asignaturas pendientes en la sociedad, pero sobre todo, dijo, en esta Legislatura.
Las personas homosexuales, bisexuales, transgénero e intersexuales son en la actualidad víctimas de acoso, maltrato, tortura, detenciones arbitrarias y asesinatos con la mayor de las impunidades, dijo Borrego Estrada, además, agregó, México está considerado como el segundo país con más asesinatos de personas trans, tanto que fuentes oficiales revelan que durante la pandemia de Covid-19, al menos uno de cada dos asesinatos por semana se han registrado contra personas homosexuales o transexuales. Lo grave, puntualizó, es que 80 por ciento de estos se quedan inscritos en la cifra negra.
“Hay que desterrar de manera definitiva las prácticas discriminatorias de toda naturaleza en la sociedad zacatecana porque atenta contra la igualdad de los seres humanos. En lo personal, como integrante de la 63 Legislatura he trabajado iniciativas de ley para fortalecer la lucha contra la discriminación: puedo mencionar dos; una en lo que respecta al matrimonio igualitario y la otra de identidad de género. Ambas se quedaron en el olvido y esto es por falta de trabajo legislativo, por el conservadurismo y el anacronismo ético y moral”.
Ambas iniciativas, detalló la legisladora, no han tenido otro objetivo que el de reconocer los derechos humanos de un segmento de la población zacatecana que por años ha sufrido discriminación y maltrato, por lo que consideró que es necesario “refrescar la memoria” de los integrantes del Poder Legislativo y a la sociedad en su conjunto, para seguir luchando en favor de los derechos de la igualdad jurídica y en contra de la discriminación de toda la naturaleza que vulnere la dignidad de los seres humanos.
“Estamos aquí para hacer leyes, no para dar clases de moral. Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. Todavía no se termina el trabajo legislativo y no quedemos con la deuda que tenemos a la sociedad. Le encargo a la diputada Perla Martínez que tiene la iniciativa de identidad de género y no se ha dictaminado, ojalá le dé la oportunidad de que la dictamine y la votemos, no deje el trabajo en el congelador. Le pido de manera personal a nombre de los colectivos y mío como diputada”, concluyó.
Por su parte, la diputada Alma Dávila Luévano coincidió en que la 63 Legislatura ha actuado de manera “retrógrada” porque no se ha cumplido con lo que las Cortes Internacionales han estipulado en materia de derechos humanos. “Fue evidente que por una doble moral no se aprobó el matrimonio igualitario y también lo de la incitativa de la identidad, pues es desafortunado que esas dobles morales sean las que conduzcan esos derechos humanos de las personas”, aseveró, porque además dañan también a sus familias en las que seguro hay algún miembro perteneciente a este sector.
