■ Con 100 o 120 pesos de carne nos daban más del kilo; ahora apenas es el kilo, afirman
■ Por el incremento a los alimentos que contienen azúcar, cambió su estilo de vida, señalan
Amas de casa coinciden en que en estos primeros dos meses del año han disminuido sus compras de la canasta básica debido a los aumentos de precios que se ha dado en algunos productos, entre ellos el limón, la carne y algunas verduras.
Rosaura Rodríguez, ama de casa, quien hace sus compras en el Mercado de Carnes, comentó que “antes comprábamos 100 o 120 pesos de carne, y nos daban más de un kilo, y ahora con la misma cantidad nos dan apenas el kilo”.
El ingreso familiar es de casi 3 mil pesos quincenales, de los cuales no le queda dinero para realizar actividades recreativas como ir al cine, comer en algún restaurante o comprarse artículos personales. Dijo que ese dinero se destina para el pago de servicios básicos como agua, luz, teléfono, además de comprar gasolina.
En meses anteriores, señaló, compraba el limón por kilos, ahora sólo se compra por piezas, tres o cuatro, pues llega a costar más de 30 pesos. Además, con el incremento a los alimentos que contienen azúcar, cambió su estilo de vida.
“Ya nos hicimos más saludables, ya evitamos comprar refrescos y pan dulce. Y si vamos a tener un convivio familiar; pues llevamos de coperacha porque esta difícil que alguien se anime a hacer una fiesta solo”, señaló Rosaura.
Por su parte, Esperanza Delgado manifestó que ha disminuido la compra de productos como jitomate, limón, papa y carne, pues “ya no alcanza, está todo muy caro, y a echarle creatividad y hacer mucho con poco”, dijo la mujer.
Con un ingreso de 150 pesos diarios, se las ingenia para realizar la compra de comida para tener desayuno, comida y cena para cuatro integrantes de su familia. El aumento de gasolina y transporte no la afecta, pues vive en la zona centro y para trasladarse lo hace caminando.
Daniel Rojas Aguilera, jefe de familia, tiene un ingreso diario de 230 pesos aproximadamente, y más de 50 por ciento de este dinero se destina para el pago de gasolina, y el resto para comprar los alimentos del día.
Manifestó que cada vez compra menos mandado, ya que los precios de carne, frutas y verduras son excesivos. “Suben las cosas, la gasolina y el camión, pero no suben los sueldos; que suban los sueldos también para poder adquirir alimentos”, expone.
