■ El inicio de año es el más violento del que se tenga registro, según cifras
El documento llamado Contrato por Zacatecas, que fue firmado por el gobernador Alejandro Tello Cristerna cuando todavía era candidato, incluye varios puntos en el ámbito de seguridad en el que destaca, como primer compromiso, el “promover una cultura de la paz”.
Aunque esta meta es a largo plazo y se plantea para haberla cumplido al final de su mandato, dentro de cinco años, en los seis primeros meses no se ha tenido mejora en los indicadores de percepción de seguridad y tranquilidad ciudadana y tampoco en las cifras oficiales de incidencia delictiva.
Por el contrario, los números han empeorado registrándose ya el inicio de año más violento del que se tenga registro, sobre todo, en materia de homicidios dolosos que las autoridades vinculan casi en su totalidad a la lucha entre los grupos de la delincuencia organizada, de secuestros y de extorsiones; todos delitos de alto impacto que son los que generan una sensación de mayor inseguridad entre los zacatecanos.
De acuerdo con los datos ofrecidos por el propio procurador general de Justicia del estado y a lo reportado por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), en lo que va del año en Zacatecas se han cometido ya más de 120 homicidios dolosos y más de 13 secuestros.
El camino hacia la promoción de una cultura de la paz, por tanto, ha iniciado en la dirección contraria al no haberse registrado mejoras en este sentido, pero sí retrocesos en los niveles de violencia.
La consolidación de una “policía profesional” es otra de las promesas que se incluyen en el Contrato por Zacatecas. En materia de corporaciones de seguridad, a seis meses de haber rendido protesta, el mandatario estatal y las dependencias de esta área enfrentan problemas en el reclutamiento.
Tanto en el cuerpo de Policía Estatal como el Ministerial deben lidiar en la contratación de nuevos elementos con la falta de interés o con el hecho de que no se pasan satisfactoriamente las pruebas de confianza y demás controles que son necesarios para ingresar a estas corporaciones.
Asimismo, como ya han expresado las autoridades, hay un déficit en el número de policías municipales que alcanza la cifra de 900 agentes adicionales que se requieren para tener la fuerza mínima a fin de cumplir con las labores de seguridad en todo el estado.
La instalación de cámaras en las patrullas, de forma que se pueda tener un registro de la actuación policial que sirva de garantía y defensa tanto de los ciudadanos como del propio agente de seguridad, es un tema que a la fecha está pendiente, al igual que la conformación del que en el Contrato por Zacatecas se denomina como “Sistema Estratégico de Inteligencia”.
