La Habana. El líder cubano Fidel Castro se reunió este miércoles con su amigo, el teólogo brasileño Frei Betto, a quien propuso «actualizar» el libro Fidel y la religión, que recoge opiniones suyas sobre temas religiosos y sociales.
«Hoy por la tarde estuve en la casa del comandante Fidel Castro, y lo encontré leyendo el libro» y «me decía que quizás un día podamos actualizar» ese texto, publicado por primera vez en 1985, declaró Betto a la televisión cubana.
«Me encanta esa disposición de Fidel», añadió el dominico brasileño, un exponente de la Teología de la Liberación en América Latina.
A diferencia de otras veces en que ha visitado a Castro -la anterior el pasado 27 de enero- Betto no precisó detalles sobre la salud del padre de la revolución cubana, de 88 años y retirado del mando desde 2006 por razones de salud.
Cuando lo visitó en enero, también en su hogar, en el oeste de La Habana, dijo que gozaba «de muy buena salud y muy buen humor».
Betto dijo que comentó a Castro «que en enero de este año toda la prensa de Brasil lo llamó porque había la noticia de que (…) había muerto», y que el líder cubano le respondió que «para infelicidad de mis enemigos, yo sigo vivo».
«Y espero que siga vivo por muchos, muchos años», agregó Betto, tras subrayar que su encuentro con Castro fue «muy interesante».
«Fidel y la religión fue el resultado de una entrevista de 23 horas que Betto le hizo a Castro, quien sostiene en ese libro, entre otros criterios que, desde el punto de vista educativo, fijó su atención «hacia aspectos revolucionarios de la doctrina cristiana».
«A lo largo de estos años he tenido la oportunidad de expresar la coherencia que existe entre el pensamiento cristiano y el pensamiento revolucionario», asegura Fidel en el libro.
Betto dijo que el libro, traducido a varios idiomas, «provocó mucho interés» dentro y fuera de la isla, y que «el papa Juan Pablo II» lo leyó y que «le pareció muy positivo».
Castro, que en su retiro se ha dedicado a escribir libros y artículos de prensa, reapareció en público el 30 de marzo, tras una ausencia de 14 meses, en un complejo educacional de La Habana donde se reunió con jóvenes venezolanos, señalaron el sábado pasado medios locales.
