En memoria de Uziel Gutiérrez de la Isla (1954-2020),
cronista de la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas.
Conocí a Uziel en un espacio físico y simbólico que reúne a personas interesadas por la historia de la medicina desde los años cincuenta del siglo XX, uno de los auditorios del Centro Médico Siglo XXI de la Ciudad de México.
En espera de iniciar una reunión académica, el Mtro. Uziel Gutiérrez de la Isla se aproximó, y con su habitual sonrisa, se presentó ofreciendo su apoyo solidario para el buen desempeño de las reuniones que mes con mes efectuábamos.
Se trataba de las sesiones académicas de la Sociedad Mexicana de Historia y Filosofía de la Medicina (en adelante SMHyFM), y que en aquellos años encabezaba la que esto escribe, con la grata y valiosa colaboración de Ana Lilia Higuera Olivo y Alfredo Paulo Maya, quienes me acompañaron durante mi gestión como presidenta ante dicha corporación.
La SMHyFM es una asociación civil fundada en los años cincuenta del siglo pasado para promover los estudios y la difusión de la historia de la medicina. Fue constituida por iniciativa de médicos, pero recibía, y recibe aún, a socios de distintas formaciones profesionales y ocupaciones, que muestren interés por la historia, la antropología médica, la filosofía y la ética médica, con una visión integradora que admite las voces de disciplinas hermanas como la odontología, la química, la farmacia y la veterinaria, entre muchas otras.
De buen carácter, siempre alegre y sensible, Uziel se convirtió poco a poco en el responsable de la memoria visual de los actos académicos en torno a distintos temas, como diversos los enfoques de socios, invitados y participantes. La pasión de Uziel por la historia de las ciencias de la salud lo llevó a recorrer el largo tramo desde su natal Zacatecas hasta la Ciudad de México, para registrar los actos mensuales de esa corporación académica, con la ayuda y compañía de su inseparable hermana, Eunice.
Llegaba con anticipación, siempre con el cuidado de estar preparado para el inicio de los actos, y durante dos horas, a veces más, a veces menos, se colocaba detrás de su cámara para ser testigo de lo dicho por los participantes.
Fundador de la Red de Historiadores de las Ciencias de la Salud y de la Red Latinoamericana de Cronistas, parece que Uziel se adelantó a los tiempos para crear y fortalecer vínculos entre comunidades hermanas, orientados por intereses comunes. Si bien abrevó de la farmacia, la odontología y las ciencias de la salud, siempre tuvo a la Historia como armazón.
Al respecto, recuerda el doctor en Antropología Alfredo Paulo Maya, que el impulso que Uziel le imprimió a su proyecto para crear la Red de Historiadores probablemente derivó de su experiencia como cronista visual de la SMHFM, pues así pudo conocer las representaciones de este espacio simbólico, además: “Era un historiador de la medicina que promovía el trabajo en equipo. No gustaba anunciar abiertamente sus proyectos de investigación, quizá porque eran de vida. Ejemplo de ello era su fascinación por la farmacia, la botica y los procedimientos galénicos para elaborar sus medicamentos, el interés por consolidar un archivo de la imagen de los colegas y eventos que de alguna manera estaban relacionados con la historia de las ciencias de la salud”.
Uziel trabajó arduamente y deja obra inconclusa que por fortuna será pronto difundida para el deleite de propios y extraños.
Ana Lilia Higuera Olivo, odontóloga y doctora en Bioética, tiene presente al Mtro. Gutiérrez de la Isla por su entusiasmo y compromiso, “hombre formal, atento, carismático y entusiasta, quien buscó construir la memoria gráfica de dicha Sociedad durante varios años. Gran conocedor de la farmacéutica médica, pasado y presente se conjugaban en su vocación de cronista y de historiador, para relatar y mantener viva la memoria interactiva de las ciencias de la salud: química y terapéutica… Medicina y odontología… Botica y farmacia… Pasado y presente, estuvieron vinculados siempre a su prospectiva de vida”.
Asimismo, “el recuerdo de la botica recreada en el espacio memorístico de su galénica farmacia modeló con infinidad de piezas de un pasado farmacéutico que gritaba un presente de grandes expectativas, sueños e historia… La historia de su vocación, pasión y amor por la preservación de un pasado que se volvió su presente”.
Así, a través de estas breves líneas, los integrantes de aquella mesa directiva de la SMHyFM ─poco más de diez años atrás─ recordamos a Uziel uniendo los recuerdos y palabras escritas de mis queridos amigos Ana Lilia y Alfredo, para formar parte de este modesto homenaje.
Esperamos sea recibido para rememorar su espíritu solidario, consistente, completo, según lo define el diccionario. Así recordamos a Uziel Gutiérrez de la Isla, a propósito de estos días de la celebración del Día de Muertos, en el que su espíritu estará rondando aún, entre la Ciudad de México y Zacatecas.
Expresidenta de la Sociedad Mexicana
de Historia y Filosofía de la Medicina
