Inicia la semana con muchas expectativas para donde uno quiera asomarse. El clima frío nos permite empeñarnos en el cobijo donde a veces, desde el reposo, pueden surgir buenas ideas, incluso, hasta nuevas ideas. Por ahora quisiera omitirse el momento para escribir sobre un hecho histórico largamente soñado. Un cambio inesperado por lo tantos rounds perdidos en una contienda contra todo lo inexplicable. Al rato se sabrá hacia dónde conduce esta experiencia política. Luego podremos saber si la realidad histórica se asemeja a lo buscado.
El día de hoy se aprovecha el dominio de una sola efeméride para hablar de lo cotidiano en un ámbito poco consentido por el público y los presupuestos para desarrollar obra pública. Habrá que mencionar otros esfuerzos en los que este servidor se ve inmerso. Recién concluyó un programa hecho a base de esfuerzo del bueno de varias entidades que de un modo u otro, unos por necesidad y otros por obligación tienen la encomienda de hacer cultura transversal para público oportuno. Las manifestaciones culturales hechas por gente están a la mano y la gente que se anima a vivir momentos fuera de lo común que debieran ser comunes para instituciones, comunidad creativa y público. Es complicado explicar lo escrito antes, pero ya está hecho.
En uno de esos fenómenos de interacción creativa entre arte aplicado y sujetos recurrentes, por llamarlo de un modo, se llevó a cabo, durante el período que abarcó entre junio y noviembre del año en curso, el Programa de Cultura en la Ciudadela. Como su nombre lo indica, fue una aventura que se concentró principalmente en las disciplinas de la música y el teatro. Todos los lunes transcurridos durante este tiempo hubo buen ambiente. Teatro o música. Fuera de horarios estelares.
Por el lado institucional, el Instituto de Cultura Zacatecano en sus buenos oficios de hacer saber que producen los artistas zacatecanos en estas dos disciplinas. Se puede ver el empeño el de su director el maestro Alfonso Vázquez Sosa de mantener vivas estas disciplinas, la Dirección de Difusión y el personal que ahí se descabeza, desde el maestro Alan Ulises Gómez Bazavilvazo, la Sra. Juanis González Rosales en la organización, administración y seguimiento de este proyecto que se dio hombro con hombro con los grupos de la Unidad Académica de Música de la Universidad Autónoma de Zacatecas y un grupo de Teatro Independiente, no hay motivos para emitir queja alguna. Además, uno de los ámbitos donde esta interacción cultural puede verse como un fenómeno natural es en el Centro Cultural Ciudadela del Arte donde ocurren un montón de cosas además del programa bajo análisis. El empeño del Ing. Manuel Meza Montalvo es no tanto vital sino irrepetible para llevar a cabo este tipo de proyectos.
Este proyecto tuvo alrededor de doce conciertos, todos sin desperdicio, llenos de entrega y aporte musical por sus virtuosos ejecutantes, la mayoría egresados o alumnos en la UAZ. El numeroso público que asistió a estas experiencias no va a poder olvidarlos fácilmente, tanto por la calidad de las obras expuestas, sino por los espacios en que estos se llevaron a cabo.
En lo que al teatro respecta, el Taller Laboratorio Teatral “Escenautas” le puso sabor al caldo con dos monólogos con puestas escénicas únicas que de alguna manera u otra desde su aparente anonimato le aporta a la escena una propuesta original altamente creativa y propositiva, con aspectos que tienen que ver con validación del arte teatral, la educación de audiencias y la dignificación de espacios con potencial escénico.
Debiera haber un empeño especial en la difusión no tanto de esta propuesta sino de la gran mayoría que aborda el Estado para difundir aspectos educativos, artísticos y culturales. Afecta a muchas instancias dedicadas a estos empeños. Pudiera reinventarse.
Incluso, fue muy grato constatar la agilidad que el Lic. Pablo Torres Corpus al aspecto administrativo, no deja de ser grato para los creativos que los estímulos a la creatividad y a la propuesta sean más oportunos cuanto más oportunamente son dispensados.
En fin, se acabó la fiesta y se espera que el próximo año este programa experimental rinda frutos con temporadas más ambiciosas y complementadas con éxito. El tiempo dirá.
